"Nos falta dar un golpe encima de la mesa, nos toca hacerlo", dijo Javier Olaizola nada más sentarse en la sala de prensa de Son Bibiloni. No es la primera vez que lo hace, ni seguramente la última. Pero es el diagnóstico que considera más claro para solucionar los problemas del Mallorca.

El técnico tiene todas las esperanzas puestas en revertir la situación de su equipo, a tres puntos de la salvación, empezando por vencer esta tarde en El Alcoraz."Tenemos ya muchas ganas de que llegue el partido contra el Huesca, de jugarlo y de ganarlo. Nos falta poco para conseguir la deseada victoria. El equipo trabaja espectacular, hay confianza y hay fe. Sólo nos falta cerrarlo todo con los tres puntos. No será fácil pero vamos a salir a ganar el partido desde el primer momento", reflexionó ante los periodistas.

El vasco pronunció un discurso calcado al de otras ocasiones, aunque es consciente de que cada vez queda menos tiempo para reaccionar. "El tren de la permanencia pasa por salir a muerte en cada partido. Por las connotaciones y por cómo está la clasificación es indudable que el partido es importantísimo. Tiene connotaciones de final como la tienen los partidos que nos quedan", confesó convencido.

Olaizola volvió a demostrar que está esperanzado en salir de los puestos de abajo porque no paró de elogiar a sus pupilos. "Soy optimista y ver a este grupo entrenar es una gozada. El equipo hace muchas cosas bien para que no llegue la victoria ya", comentó. El donostiarra, ante la baja por lesión de Juan Domínguez, deslizó la posibilidad de apostar por Yuste como mediocentro, por lo que la pareja de centrales sería la formada por Ansotegi y Raíllo. "Me gustó el rendimiento que dio ante el Lugo cuando le tocó jugar ahí, estuvo a un gran nivel. De hecho, se le fichó como mediocentro procedente de un club de Primera", destacó.

El preparador se mostró comprensivo con Brandon, que no marca desde la decimoquinta jornada. "Brandon volverá a marcar. Es normal que tenga ansiedad, le falta entrar en una buena dinámica", dijo sin titutebar, antes de asegurar que también ve con buenos ojos la pareja de ataque formada por Dalmau y Lekic. "Me gustaron contra el Lugo", subrayó.

Olaizola elogió al rival de esta tarde. "El Huesca es un equipo muy competitivo, con un gran técnico que conoce bien la categoría y que a base de trabajo, orden y actitud ya tienen 40 puntos. Samu Sáiz destaca, es un conjunto solidario y trabajador", apuntó, aunque espera que el Mallorca pueda disponer de la posesión. "Creo que vamos a tener más el balón que otras veces fuera de casa, pero ellos salen muy bien a la contra", sentenció precavido.

El bermellón no dudó a la hora de agradecer el respaldo que le está dispensando el consejero delegado en estos malos momentos. "No tengo ni una sola queja. Estos señores han hecho una inversión fortísima y se han implicado totalmente con el equipo. Nos apoyan siempre y están convencidos, ya que así nos lo transmiten, de que le daremos la vuelta a la situación. A ver si llega la estabilidad deportiva porque el resto del club funciona de forma espectacular. Tiene razón cuando dice que estamos en la miseria deportiva", dijo en primera instancia al respecto. "Solo falta el éxito deportivo, en los demás parecemos el City. A veces le pido que deje de darnos tantos privilegios porque somos de Segunda", agregó.