­Joaquín Caparrós desveló anoche que su agente Gorka Arrinda se desplazará a la isla para conversar con el máximo accionista Llorenç Serra Ferrer acerca de la propuesta de renovación que tiene sobre la mesa. "La próxima semana vendrá mi representante para hablar con el Mallorca", explicó durante el programa de IB3 Televisió ´Golèmica´.

?El preparador de los bermellones se negó a dar pistas sobre su futuro, aunque dejó claro que no cierra la puerta a continuar en el banquillo de Son Moix. "Por supuesto que puedo continuar. Llevamos tiempo hablando sobre jugadores que acaban contrato y demarcaciones que hay que reforzar. Serra Ferrer sabe perfectamente lo que quiero y el perfil de equipo que quiero porque el entrenador debe tener voz y voto en la preparación. Quiero dejar claro que mi familia y yo no nos encontramos magníficamente bien aquí", subrayó.

?El utrerano admitió que no quiere que su decisión se convierta en el eterno tema de debate estos días entre el mallorquinismo e incluso se atrevió a poner fecha. "En quince días tiene que saberse, o antes de que acabe la Liga", apuntó escuetamente. "Pero no hay que focalizar en mí todos los temas del futuro, aunque entiendo que sea lógico, porque los futbolistas son los verdaderos artífices de lo que se ha conseguido y hay que darle importancia a ellos", comentó. Caparrós negó que tenga ofertas sobre la mesa del Sevilla y del Valencia, clubes que le tienen en su agenda. "No tengo ninguna propuesta de estos equipos, no hay nada con ellos. Hablar de esto es avanzar demasiado porque, además, estos equipos tienen entrenadores", dijo.

?El andaluz reclamó tranquilidad a nivel institucional como uno de los condicionantes para que continúe. "Es importante saber si Serra Ferrer y Cladera siguen. La paz institucional es fundamental. Esto no puede ser una pelea porque el Mallorca está tentando a la suerte", afirmó antes de lamentar el pobre apoyo que tiene el equipo en las gradas.