"Sant Bartomeu no sería lo mismo sin los Cossiers y Dimoni", confiesan los montuïrers y, efectivamente, así es. Ayer, 24 de agosto, festividad del patrón, volvieron a ser los grandes protagonistas de la jornada. A las diez de la mañana, como es habitual, iniciaron el recorrido por las calles de la población. El turno correspondió a Tomeu Fullana (dama), Toni Miralles, Miquel Lluís Arbona, Toni Nicolau, Pere Servera, Toni Bergues y Miquel Àngel Sansó. El personaje que representó al Dimoni fue de nuevo Joan Mesquida Llinàs que cumplió diez "santbartomeus" de actuaciones. Los acompañamientos musicales corrieron a cargo de los flabiolers Tomás Salom y Pep Toni Rubio y del xeremier, Pep Rotger. En esta jornada del 24 de agosto, los Cossiers efectuaron la tercera y última de sus actuaciones de este año.

Tras el recorrido urbano hubo Misa Mayor. La jornada patronal tuvo diferentes citas de interés.

"Nunca dejaría de actuar como Dimoni de Sant Bartomeu", afirmó Joan Mesquida Llinàs, joven que ha cumplido diez años de actuaciones como personaje central de las fiestas. "Pienso seguir hasta los quince años; me encanta ser el Dimoni de los Cossiers de Montuïri". Sustituyó en 2002 a Juanjo López de 42 años quien se retiró en 2001 tras 22 años de actuaciones durante las fiestas patronales. Joan cayó durante las corridas del día de sa Revetla, frente a la casa rectoral. Ayer actuó con una mano vendada y algunas pequeñas heridas en el cuerpo. Hoy, jueves, animará las carreres de joies que los pequeños disputan en sa Segona Festa.