Vent Illes es el nombre de la empresa que, según sus cálculos, comenzará a fabricar dentro de unos meses los primeros aerogeneradores de patente mallorquina. En estos momentos está negociando la adquisición de una nave industrial en el polígono de Inca. Genaro Llamas, uno de los directivos de la empresa, sostiene que "se están barajando dos o tres opciones por lo que la previsión es la de iniciar el montaje en breve", sostiene.

El desarrollo de este molino de producción eléctrica ha sido fruto de los estudios de varios investigadores. Josep Pascual, doctor ingeniero, explica que "las islas tienen unas particularidades que hacen prácticamente inviable la instalación de molinos como los que se instalan en el continente. Se trata de verdaderas moles que impactarían negativamente en el paisaje". Para desarrollar el aerogenerador de Vent Illes se han tenido en cuenta "las necesidades de las islas y sus recursos. Tras muchos análisis hemos dado con un aerogenerador pensado exclusivamente para las islas del Mediterráneo", asegura.

Desarrollo sostenible

Pascual ha valorado que "en el Mediterráneo hay unas 3.000 islas habitadas. La mayoría viven del turismo y todas se plantean el desarrollo sostenible". El ingeniero sostiene que "ante esas premisas se impone una producción de energía limpia que no dañe ni impacte visualmente en el medio. Por ello hemos diseñado un aerogenerador que funciona con poco viento y que tiene unas dimensiones mucho más reducidas que las habituales del continente".

El sistema de montaje del aerogenerador es sencillo y pensado para que el mantenimiento se lleve a cabo con escasos recursos. Así pues, sólo precisa una grúa para la primera vez que se instale; para cualquier otra reparación incorpora una grúa interna que permite subir y bajar cualquier pieza.

La primera fase del proyecto supone la construcción de dos prototipos que se instalarán en Inca. Pascual indica que "el Ayuntamiento ha ofrecido el parque del Serral para llevar a cabo la experiencia ya que proyecta la construcción en el lugar de un museo, a cielo abierto, de los molinos del Mediterráneo". Los dos prototipos funcionarán durante un año y se evaluará su rendimiento.

La segunda fase del proyecto es la fabricación en serie. Llamas indica que "la idea es que la fábrica madre esté en Inca y que desde aquí se elaboren todas las piezas para diferentes proyectos de parques eólicos en otras islas".

El cálculo de costes elaborado por Vent Illes implica una inversión de dos millones de euros para la primera fase. Se prevé igualmente que se generen entre 8 y 10 puestos de trabajo que se triplicarían al comenzarse la producción en serie.

En las últimas semanas, el municipio ha dado pasos importantes en la apuesta por las energías renovables. Un ejemplo de ello es que el municipio se ha comprometido a incluir en el planeamiento urbanístico solares de titularidad pública o privada en los que se permita la instalación de centros de captación de energías renovables para consumo municipal.

El detalle.

Un molino basta para abastecer 200 casas

El aerogenerador mallorquín mide 40 metros frente a los 90 de los grandes molinos del continente. El radio de sus aspas es de 22 metros. Funciona con menos viento pues arranca con una fuerza de 3 metros por segundo frente a los 5 metros por segundo que necesitan los habituales. Con una media anual de 4,5 metros por segundo tiene un rendimiento óptimo. Su potencia es de 850 kilovatios. Se le calcula una producción de 1.870.000 kilovatios hora anuales, lo que supone que un molino puede abastecer 200 viviendas durante todo el año. El mástil es de metal y las palas son de fibra de vidrio