La junta de Gobierno aprobó ayer prorrogar durante un año el Servicio Municipal de Atención Integral a la Violencia de Género ya que "la Fundació IRES presta un buen servicio y ha aceptado no subir los precios tal y como le pedía el Ayuntamiento de Palma". Así el servicio se mantendrá de manera ininterrumpida.