El 21,8% de los estudiantes de Enseñanza Secundaria de 14-18 años se han emborrachado al menos una vez al mes. Estos datos se desprenden a través de un estudio del Instituto de Política Familiar de Balears (IPFB). De acuerdo con este sondeo, recogido en la Encuesta Estatal sobre el Uso de Drogas en Estudiantes de Enseñanzas Secundarias (Estudes), el 47,3% de los adolescentes se ha emborrachado en el último año y el 58% alguna vez en su vida.
El presidente del Instituto de Política Familiar, Agustín Buades, se cuestionó el papel de la actual ordenanza municipal del Ayuntamiento de Palma para regular el botellón. "Marketing electoral o prevención de consumo de drogas", se planteó.
La entidad reclamó el valor educativo del ocio. "Estamos completamente de espaldas, familia, escuela y sociedad", denunció a través de un comunicado. Asimismo, el IPFB aseguró que la familia sólo es consciente cuando "se presenta un problema".
Según este estudio elaborado por investigadores de universidades de Alicante, Valencia y Castellón, "los jóvenes practican botellón y sus padres, en general, no lo saben". Sólo el 6,6% de los padres afirma que el consumo de alcohol se encuentra entre las actividades habituales que realiza su hijo los fines de semana.
El Instituto de Política Familiar de Balears (IPFB) hace un llamamiento público a "atender más a los problemas sanitarios derivados del consumo de alcohol". Entre las alternativas que propugna esta entidad al botellón, reclaman también la "formación de los padres". A través de esta medida consideran que podrán estar mejor informados y podrán detectar y afrontar con una mayor dosis de realismo el consumo de alcohol de sus hijos.
