El 'efecto Mestre' marcó y pesó en la extraordinaria victoria ayer del caballo francés Tropic du Hêtre en la edición número 53 del 'Gran Premi Ciutat de Palma'.

Una de las grandes carreras de la temporada de invierno del Hipòdrom Son Pardo. Una clásica en la que el representante de la felanitxera Quadra Es Pou Florit superó en los metros finales al gran favorito al triunfo. Caso de su compatriota Ramses des Charmes, dirigido por Joan Toni Riera.

Y es que tras apenas forzar en la salida, en un tramo de 150 metros recorrido a una media de 1:04'7 minutos, Miquel Mestre acertó a la hora de mantener a Tropic du Hêtre durante casi todo el recorrido a la estela de Ramses des Charmes, mientras Ritz du Bocage, con Jaume Fluxá, marcaba el ritmo en punta y se negaba a ceder la iniciativa al caballo dirigido por Es Boveret.

Miquel Mestre ordenó acelerar a su pupilo en exclusiva a lo largo de la recta de meta, para terminar desbordando por medio cuerpo al representante de la Cuadra Torreflorida. "Me esperaba un premio, pero no ganar, aunque sabía que el caballo estaba bien y que se trataba de no abusar", explicó.

Igualmente, rodando a un buen promedio kilométrico de 1:13'8 minutos sobre los 1.650 metros -la octava mejor marca de un vencedor en la prueba-, el conductor número uno de la estadística de victorias del trote balear a lo largo del año pasado conquistó su primer éxito en el histórico 'Ciutat de Palma'.

Una prueba internacional, de primer nivel dentro del calendario mallorquín, cuya primera edición se disputó en 1966 registrándose la victoria de Marko (1:21'9). Una carrera creada para favorecer la selección y que en esta ocasión no mereció la organización de una cuarentena de control de dopaje previa a su disputa. Una medida que, coincidiendo con una de las carreras más trascendentes del calendario, de nuevo se han saltado la Federació Balear de Trot, que preside Joan Llabata, y el Institut de l'Esport Hípic del Consell de Mallorca, al frente del que se mantiene a Jaume Ramis.

De la misma forma, coincide que el 'Gran Premi Ciutat de Palma' es la primera carrera en la que el profesional Miquel Mestre, con 121 triunfos en el 2017, conducía a Tropic du Hêtre. Un caballo francés que en los últimos meses no daba la talla, ni rendía al nivel esperado por sus responsables.

Sin embargo, ha encontrado un gran revulsivo en las manos del conductor natural de Manacor, de 31 años de edad, que ayer le diseñó un recorrido sin excesos, ni gastos inútiles de fuerzas. Una perfecta medición, y gestión, de su esfuerzo que permitió a Tropic du Hêtre conquistar su tercer triunfo mallorquín, en nueve carreras disputadas, desde su debut en la isla a finales de agosto.