El Urbia Palmaregresa al trabajo tras un verano de locos. El equipo que dirige Marcos Dreyer evitó su desaparición al reunir, 'in extremis', el dinero necesario para inscribir a su equipo en la Federación Española de Voleibol. La desaparición del Can Ventura obligó al cuerpo técnico encabezado por Dreyer a lidiar por unas pistas por las que nunca antes habían jugado. Ganaron el partido.
Ayer iniciaron la pretemporada con algunas caras nuevas, cargados de moral y con el complicado reto de intentar igualar los éxitos de la pasada campaña. Los títulos de Superliga y Copa del Rey son el gran aval de un club que, tras luchar incansablemente durante el verano, quiere volver a hacer disfrutar del mejor voleibol nacional a la parroquia mallorquina. "Muchos de los jugadores han vivido el drama que hemos sufrido, pero creo que ha llegado el momento de pasar página y empezar a hablar de voley. Contamos con un gran equipo y, pese a haber accedido al mercado un poco tarde, estoy muy contento", admite Marcos Dreyer.
El 20 de julio el entrenador del Urbia se quitó un gran peso de encima. Su equipo se inscribía en la máxima competición del voleibol nacional. Llevaban más de un mes trabajando en la búsqueda de patrocinadores y habían dejado aparcada la elaboración de la plantilla. "Por suerte hubo muchos jugadores que apostaron por el equipo pese a no saber si podríamos inscribirnos. Es cierto que se han ido piezas importantes, pero hemos tenido la suerte de poder reforzar esas posiciones con grandes fichajes", relata Dreyer.
Carlos Bibiloni (izq), segundo entrenador, y Marcos Dreyer (der), técnico del Urbia, flanquean a la plantilla del Palma Voley de la temporada 2017/18. P.J.O.
Cinco son las caras nuevas del proyecto: Marcelo Hister, Nico Ronchi, Javi Martínez, Zóio, y Tià Sánchez. Y siete, los jugadores que han renovado sus votos: Jorge Fernández, Daniel Macarro, Víctor Viciana, John Molina, Joan Perelló, Álex Fernández y Renzo Cairus. Estas son las piezas con las que el técnico jugará a lo largo de la temporada, una campaña en la que intentarán igualar los logros de la pasada: "Hacer lo que hicimos el año pasado es casi imposible. Lo importante ahora mismo es que las nuevas incorporaciones entiendan el espíritu que reside en este equipo", confiesa el entrenador. Un mensaje del que no se aleja Jorge Fernández, capitán del equipo: "Superar lo del año pasado es imposible porque no se puede ganar más de lo que ganamos. Nuestro objetivo esta temporada tiene que ser dar lo mejor de nosotros. Eso nos permitirá estar en lo más alto y, si encima cae algún título, mucho mejor".
El próximo 7 de octubre empieza la Liga. El sorteo del calendario ha querido que el Ushuaïa Ibiza sea la primera piedra del camino. Un rival que conoce bien el uruguayo Nicolas Ronchi, nueva incorporación del Urbia. "Competir por el título es una motivación para mí. Llevaba ya unos cuantos años en Eivissa y no tuvimos la suerte de conseguir nada. Decidí venir para aquí para poder luchar. Queremos jugar y queremos ganar, pero no conseguir siempre la victoria tampoco debe ser un fracaso" confiesa el opuesto de 34 años.
El Pabellón Los Planos de Teruel albergará el próximo 1 de noviembre, a las 18 horas, la Supercopa masculina de voleibol, que disputarán el campeón de la Superliga y de la Copa del Rey, el Urbia Voley Palma, y el vigente campeón de este trofeo, el Teruel, informó ayer la Federación.
