Anthony Strong consiguió el miércoles noche que el público de sa Pobla vibrara con su voz y su piano, mientras él mismo inmortalizaba el momento con su teléfono móvil, sin la más mínima timidez, para colgarlo en su red social. "Sí, Mallorca!! Buenas vibraciones esta noche en Sa Pobla; muchísimas gracias", dijo poco después con una imagen del numeroso público que asistió para verlo. En el segundo concierto del Festival Mallorca Jazz sa Pobla, el público traspasó los límites del aforo permitido dentro del recinto para el festival, los demás vieron el concierto fuera de este pero en la propia Plaza Mayor. A ellos se dirigió Strong: "Para vosotros va este concierto también", explicó. Inclusión, no quería dejar a nadie fuera de su órbita sonora.

Su pasión, frescura, alegría y elegancia le caracterizaron. Este caballero inglés persiguió desde un principio conectar con el público y lo consiguió. Lo hizo con entusiasmo; es evidente que vibra encima de un escenario y quiere compartir ese buen sentir, el placer de lo que está viviendo él mismo con su público. Influenciado por artistas como Bill Evans, Frank Sinatra o Nat King Cole, a quien reconoce haber escuchado desde pequeño, Strong revivió temas estándares y otros propios. La versión de Cheek to Cheek reflejó sus influencias, tomando estándares de jazz y clásicos de swing de la vieja escuela, reinterpretados con su propio estilo, vivaz y estimulante.

¿Se acuerdan de la Motown, aquella discográfica de música negra? Strong consiguió reavivar dicho sello hecho leyenda.

Cabe recordar que este joven inglés se ha convertido en el número uno de los crooners de hoy en día. El disco con el que se dio a conocer, Delovely, encabezó las listas de ventas de discos de jazz en 2011. También sus vídeos son muy vistos en la red. Él anunciaba que allí se podrían ver temas que iba interpretando como: Too Darn Hot o Once a Clear Day.