Los cajeros automáticos son el lugar por excelencia a donde los ciudadanos acuden para poder obtener dinero en efectivo de manera inmediata. No obstante, tener que estar pendiente de si hay algún desconocido cerca que pueda ver la clave de seguridad o estar hablando con un amigo por teléfono.

La Policía Nacional advierte de que en algunos casos estos motivos pueden ser suficientes para que este cliente se despiste y se vaya de esta máquina sin coger lo que había ido a buscar: su dinero.