Euforia mallorquinista para despedir al equipo de Javier Aguirre con una sola misión: regresar a la isla con la ansiada Copa del Rey. Cerca de un centenar de aficionados bermellones se han acercado esta mañana hasta el estadio de Son Moix para arropar a los jugadores que viajan hoy hacia Sevilla.

Entre aplausos y cánticos como "y si ganamos la Copa, tal vez, la vida sea más bella, no lo sé", los seguidores del Mallorca han esperado en el párking del estadio para dar el último aliento al equipo antes de partir hacia la capital andaluza.