Miles de personas han tomado las calles de Copenhague para vivir la histórica coronación de Federico X como nuevo rey de Dinamarca tras la abdicación de su madre, la Reina Margarita II.Se trata de un acontecimiento que marca un cambio generacional en la corona danesa y que también estará marcado porque es la primera vez en la que una mujer, la primera ministra Mette Frederiksen, será la encargada de proclamar al monarca.Por ello, las calles de la capital danesa se han engalanado y miles de personas, locales y de todas partes del mundo, han acudido para formar parte de este evento.