El Festival Internacional del Cante de las Minas, considerado los Óscar del flamenco, invitó al pianista mallorquín Antón Cortés cuando tenía 13 años y llegó a la final, por lo que se convirtió en el instrumentista más joven de la historia del certamen en alcanzar el podio. Lo sorprendente no solo era su corta edad, sino también que compuso él mismo la taranta que interpretó. Y ha aprendido «de forma autodidacta, de oído», dice Antón, que tocó un teclado «por primera vez a los ocho años».