La Policía Nacional recuerda que algunos contenidos injuriosos, denigrantes o la incitación a determinadas conductas a través de la Red pueden ser constitutivos de delitos recogidos en el Código Penal, con motivo de la celebración hoy del Día Mundial de Internet.

En un comunicado, la Policía aprovecha la ocasión para hacer un llamamiento a padres y educadores sobre la necesidad de inculcar a los menores prácticas seguras en la Red.

Los agentes de la Policía Nacional han impartido charlas sobre los riesgos de internet en centros educativos de toda España, que se han incrementado este año en casi un 250 por ciento, especialmente entre colectivos vulnerables como menores con algún tipo de discapacidad física o intelectual.

En los primeros cuatro meses se han impartido 4.932 charlas sobre esta materia a alumnos, asociaciones de madres y padres y personal docente de los más de 5.000 colegios que lo han solicitado a través del plan director.

Los centros escolares, asociaciones y colectivos ciudadanos pueden solicitar estas charlas con un correo electrónico a participa@policia.es.

El uso cada vez más frecuente en edades tempranas de ordenadores, tabletas, teléfonos inteligentes y otros dispositivos hace necesario que los padres y profesores guíen a los menores en el acceso a los distintos aparatos tecnológicos y establezcan unas pautas de seguridad y el riesgo de difundir determinadas imágenes o mensajes por internet.

Los ciberagentes destacan el sensible aumento de casos relacionados con delitos contra la intimidad, grabación y difusión de imágenes sexuales, chantajes y vejaciones y, en especial, entre los menores de edad.

Estas conductas se cometen gracias a los dispositivos de acceso a internet que permiten a cualquiera, y de forma muy sencilla, la grabación de imágenes y su distribución masiva e instantánea a través de la web, las redes sociales o las distintas aplicaciones de mensajería instantánea móvil.

Los especialistas de la Policía señalan que se debe concienciar a los jóvenes de la gravedad de determinadas prácticas en el uso de estos aparatos, como la toma y difusión de fotos y vídeos que atentan contra la imagen o intimidad de una persona, sobre todo, cuando son menores los afectados.

Concienciar desde el primer día a los niños de que si se vulnera el derecho a la intimidad y al honor se comete un delito, así como de los riesgos que corren y de que compartir actos o imágenes íntimas puede ser un error con efectos casi irreversibles es una cuestión fundamental para padres y adultos que rodean a los más pequeños, subraya la Policía.

Los expertos en seguridad tecnológica destacan también la importancia de establecer conjuntamente unas normas de uso y exigir el respeto a los demás siempre, así como recordar que "a internet le cuesta olvidar".