Detenida en Palma por robar 10.000 euros a varias personas tras echar droga en su bebida

La sospechosa accedía a los teléfonos de las víctimas, con sumisión química o abusando de su confianza, para realizar operaciones bancarias sin su consentimiento

La mujer, española de 21 años, está acusada de robo con violencia, hurto, estafa, coacciones y amenazas

Dos policías trasladan a la acusada tras su detención.

Dos policías trasladan a la acusada tras su detención. / M.O.I.

Marcos Ollés

Marcos Ollés

La Policía Nacional ha detenido en Palma a una joven española de 21 años por robar 10.000 euros a tres personas tras echarles droga en la bebida o abusar de su confianza para acceder a sus teléfonos móviles y realizar operaciones bancarias. La acusada amenazó también a otras víctimas para intentar desviar el dinero sustraído a sus cuentas y tratar así de no dejar rastro de sus delitos. La mujer, con antecedentes por hechos similares, está acusada de robo con violencia, hurto, estafa, coacciones y amenazas.

La investigación comenzó cuando una chica denunció que a finales del mes de septiembre del año pasado estuvo de fiesta con una amiga. Según contó, alguien debió de echarle algún tipo de droga en la bebida y no recordaba nada de lo ocurrido a partir de entonces. Solo sabía que se había despertado en el domicilio de la ahora detenida sin su bolso ni el resto de pertenencias. La víctima descubrió que habían usado su teléfono móvil cuando estaba inconsciente para realizar varias operaciones bancarias por valor de 1.500 euros

La Policía recibió otra denuncia en la que una joven contó que se citó con la acusada, con la que había trabajado tiempo atrás. Durante la cita, le dejó su teléfono móvil para que supuestamente consultara una red social. Al irse a casa comprobó que le habían sustraído el terminal y una tarjeta de crédito que guardaba en la funda, con la que se habían realizado varios cargos en su cuenta. Le quitaron 7.000 euros, casi todo el dinero que tenía. Cuando se puso en contacto con la acusada para pedirle explicaciones, la joven amenazó con enviarle a otras personas para agredirla si presentaba una denuncia. Cuando se enteró de que la víctima había acudido a la Policía, le pidió que retirase la denuncia para devolverle el dinero.

La tercera denuncia era de otra víctima a la que, abusando también de su confianza para conseguir utilizar su teléfono móvil, robó 1.000 euros. Los agentes recibieron también denuncias otras personas a las que la joven intimidó para utilizar sus cuentas bancarias en los robos y sacar luego de allí el dinero sustraído a cambio de un porcentaje.

El caso recayó en el grupo de Investigación de la Comisaría Centro de la Policía Nacional. Los agentes consiguieron recabar pruebas contra la acusada, que contaba con la ayuda de varios compinches a los que transfería el dinero para intentar no dejar rastro. Los investigadores no consiguieron localizar a la acusada, por lo que se dictó una orden de búsqueda y detención.

La sospechosa fue finalmente capturada hace una semana. El pasado 13 de enero, una patrulla de Seguridad Ciudadana de la Policía Nacional se topó con ella de madrugada en una calle de la Playa de Palma. Quedó detenida por delitos de robo con violencia, estafa, hurto, coacciones y amenazas.