La acusada confiesa que mató a su tía en Sineu en un arrebato

Tras el crimen, transportó el cadáver de la anciana, de 91 años, hasta su domicilio de Palma

La sospechosa, de 51 años, intentó hacer pasar el crimen por una muerte natural, pero la Policía descubrió una puñalada y golpes en el cadáver

La mujer detenida

La mujer detenida

La mujer de 51 años, Antonia S.G., detenida por matar a su tía, una anciana de 91 años, en Sineu confesó a los investigadores que acabó con la vida de su familiar en un arrebato. Tras el crimen, transportó el cadáver hasta su domicilio de Palma y trató entonces de zanjar el asunto como una muerte natural. Intentó conseguir un certificado de defunción sin que nadie viera el cuerpo y llegó a decir que lo había enterrado ya. Pero la Policía acabó en la vivienda y comprobó que el cuerpo estaba ahí, con una puñalada en el pecho y varios golpes. La sospechosa fue detenida y acabó confesando ante los investigadores, que ayer continuaban realizando gestiones para esclarecer lo ocurrido. La acusada aseguró que no había planificado el crimen. Parece ser que la mujer llevaba unos meses haciéndose cargo de la anciana, con quien convivía en Palma, y ambas mantenían una complicada relación.

Fue la propia acusada quien reveló la muerte de su tía a última hora de la tarde del domingo, con una insólita llamada al 061, el servicio de emergencias médicas. La mujer explicó a la operadora que le atendió que su familiar había fallecido por causas naturales y pretendía conseguir un certificado de defunción. Su interlocutora le hizo ver que el trámite no era así y que un médico debía examinar el cuerpo para confirmar la causa del fallecimiento.

La sospechosa alegó entonces que ya había enterrado el cadáver en una finca de la Serra de Tramuntana y contó que lo hizo por expreso deseo de la anciana. Sus argumentos levantaron las sospechas y desde el 061 contactaron con la Policía Nacional. Las primeras patrullas llegaron al domicilio de la mujer, en el número 3 del Passatge Son Real, entre Metge Josep Darder y Reis Catòlics, hacia las nueve de la noche del domingo. Los policías comprobaron entonces que el cadáver de la anciana estaba ahí.

Pronto descubrieron que la mujer no había fallecido por causas naturales. Todo apuntaba a que se trataba de un asesinato y el grupo de Homicidios, la Policía Científica y un médico forense se movilizaron. Al examinar el cadáver, comprobaron que presentaba una herida de arma blanca en el pecho y golpes en otras partes del cuerpo.

En un arrebato

La sobrina de la mujer fue detenida y trasladada a comisaría. No tardó en confesar la autoría del crimen, pero alegó que lo hizo de forma repentina, en un arrebato, y negó haber planeado matar a la anciana.

Según su versión, mató a su tía en un domicilio de Sineu y urdió un plan para intentar enmascarar el crimen. Transportó el cadáver hasta su casa de Palma y empezó a hacer gestiones para conseguir que constara oficialmente como una muerte natural. Según parece, pretendía deshacerse después del cuerpo.

Inspecciones

Agentes de Policía durante la inspección del piso de Palma

Agentes de Policía durante la inspección del piso de Palma / B. Ramon

Los investigadores del grupo de Homicidios se trasladaron de inmediato hasta el domicilio de Sineu indicado por la acusada, un piso situado en un bloque de viviendas de la calle s’Alou. Los dos inmuebles quedaron bajo custodia policial y a lo largo del día de ayer fueron inspeccionados por la Policía Científica, que realizó sendas inspecciones oculares para recabar evidencias.

Los investigadores están a la espera de los resultados de la autopsia al cadáver de la anciana y de realizar nuevas diligencias en las próximas horas antes de poner a la acusada a disposición judicial.

Conflictiva

La acusada vivió en Sineu, donde se labró fama de conflictiva y tuvo problemas con numerosos vecinos. Su tía y sus padres vivían, en domicilios separados, en el Passatge Son Real. Cuando hace unos meses murieron sus progenitores, la sospechosa se instaló con su tía en Palma y se hizo cargo de ella. Según los testimonios recabados, las dos mujeres mantenían una relación tensa y la acusada había manifestado que estaba cansada de encargarse de la anciana.

La Policía Nacional está tomando declaración a los allegados a las dos mujeres para ahondar en la situación familiar y tratar de aclarar el móvil del crimen.