Evita la cárcel tras maltratar y ahogar a su novia con un cable en Orpesa

Un maltratador evitará la cárcel, pese a haber sido condenado por los delitos de lesiones en el ámbito de la violencia de género y coacciones. El hombre, de 28 años y origen argelino, ha sido sentenciado por la Audiencia Provincial de Castellón a la pena de un año, tres meses y un día de cárcel -suele suspenderse si no existen antecedentes en condenas de dos años o menos- y 40 días de trabajos en beneficio de la comunidad.

Los hechos por los que ha sido procesado tuvieron lugar en noviembre del año 2021 en Orpesa, donde vivía con su pareja.

Según ha declarado probado el tribunal castellonense, estando víctima y agresor en la casa, ella cogió su teléfono móvil, siendo malinterpretada esta acción por el procesado e iniciándose una discusión por celos.

El hombre le quitó el teléfono y ella le exigió que se lo devolviera. En ese momento, él la empujó sobre la cama, se colocó sobre la mujer y la cogió por el cuello. A continuación, el condenado cogió una plancha del pelo y, sirviéndose del cable, lo colocó en el cuello de la mujer y tiró de los extremos "durante escasos segundos, imponiendo su supremacía masculina", como reza la sentencia a la que ha tenido acceso este diario. 

Después, el varón se marchó del domicilio y cerró la puerta con doble vuelta, dejando en el interior de la casa y sin llaves a la víctima, que pudo salir llamando por teléfono a la policía, siendo asistida por la Policía Local de Orpesa y agentes de la Guardia Civil.

Como consecuencia de estos hechos, la mujer sufrió excoriaciones, heridas cortantes y ansiedad. Precisó una primera asistencia médica y tardó en sanar siete días, durante las que no pudo dedicarse a sus ocupaciones habituales, como señala el documento.

El acusado, antes de la celebración del juicio, consignó 3.550 euros para la mujer por las lesiones y daños sufridos -hecho que le vale una circunstancia atenuante de reparación del daño-. También antes de la celebración de la vista, alcanzó un acuerdo con la Fiscalía Pronvincial y la acusación particular por el que reconocía los hechos y se conformaba con la pena, además de aceptar la prohibición de tenencia y porte de armas durante tres años. La justicia también contempla una orden de alejamiento, por la que tendrá prohibido acercarse a menos de 500 metros de su expareja o comunicarse con ella por cualquier medio durante cinco años.

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