Alarma por la ‘guerra’ que enfrenta a dos bandas de okupas violentos en Palma

La Policía Nacional detuvo a ocho jóvenes sudamericanos después de que tres agresores con armas blancas fueran a la calle Sant Ferran y luego un grupo se vengó por la noche - «Robaron en una panadería y a una chica le robaron el bolso»

Antigua sucursal bancaria okupada de la calle Joan Crespí de Palma.

Antigua sucursal bancaria okupada de la calle Joan Crespí de Palma. / L.MARINA

Lorenzo Marina

Lorenzo Marina

La ‘guerra’ abierta se ha declarado entre dos bandas de okupas asentados en dos antiguas sucursales bancarias de Palma. Las contiendas entre unos y otros se suceden y, la tarde del lunes, se escenificó la conflictividad con enfrentamientos en las dos casas ocupadas. El primer asalto se produjo por la tarde, con armas blancas, en la avenida de Sant Ferran. La réplica llegó horas más tarde en la calle Joan Crespí. La pelea se saldó con ocho detenciones por riña tumultuaria.

La conflictividad venía de largo, pero la alarma ha cundido en el vecindario de los locales okupados al recrudecerse el enfrentamiento. Sobre las cuatro de la tarde del lunes, tres individuos irrumpieron en la antigua sucursal de la avenida Sant Ferran. Los tres sujetos portaban armas blancas y amenazaron a los presentes. Los otros repelieron el ataque con más cuchillos, palos y alguno de ellos esgrimió un palo de golf.

Los vecinos, alarmados, llamaron a los servicios de Emergencias para denunciar el violento incidente. Agentes de la Unidad de Prevención y Reacción (UPR) de la Policía Nacional y efectivos del cercano Cuartel de la Policía Local de Palma, de la avenida Sant Ferran, acudieron al lugar para detener a los implicados.

Cuchillos y cúter intervenidos a los agresores. | POLICÍA NACIONAL

Cuchillos y cúter intervenidos a los agresores. | POLICÍA NACIONAL / lorenzo marina. palma

Un total de ocho jóvenes dominicanos, colombianos y brasileños con edades comprendidas entre los 19 y los 29 años, fueron puestos contra la pared, mientras les iban cacheando. Los agentes les intervinieron numerosas armas blancas que habían empleado en la refriega. También recuperaron un teléfono móvil que había sustraído en en un atraco en septiembre de 2021.

La escena fue presenciada por muchos vecinos de la zona. «Cuando ha llegado la Policía, muchos de ellos han tirado los cuchillos debajo de los coches y un cúter al suelo», explicó uno de los residentes.

El temor a una posible agresión o un atraco se ha instalado de forma permanente en el vecindario de la avenida Sant Ferran. «Cuando mi mujer viene de recoger a mis hijas del colegio les tengo dicho que vengan siempre por la calle principal», recalca un residente de la zona. «Hace unos días, un sábado, se paseaban con bates de béisbol», indico una comerciante.

Dos focos de conflicto

El otro foco de conflicto es otra antigua sucursal bancaria de la calle Joan Crespí de Palma. De este punto partieron, presuntamente, los tres agresores que portaban cuchillos y un cúter e irrumpieron la tarde del lunes en el local okupado de la calle Sant Ferran.

La réplica llegó horas más tarde. Poco antes de la medianoche, sobre las 23.30, sujetos de la antigua sucursal bancaria de Sant Ferran fueron a Joan Crespí para tomarse su cumplida venganza. Los intrusos accedieron al local y causaron numerosos destrozos en el mobiliario mientras amenazaban a los presentes mientras esgrimían armas blancas. Luego se dieron a la fuga.

Las fechorías de determinados individuos del local okupado de Joan Crespí son sobradamente conocidas por muchos vecinos de la zona. «También trataron de okupar un piso de la calle. Atracaron una panadería y a una chica le robaron el bolso después de cortarle la correa con un cuchillo» abundó una vecina. «No solo son conflictivos los que viven siempre allí. También viene a menudo mucha chusma de fuera», explicó.

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