La pieza que golpeó al bebé que falleció el sábado en Son Espases no era una teja, sino una placa de aluminio que se desprendió de un escenario que hay en el interior del hotel de Cala Rajada donde ocurrió el accidente.

Fuentes cercanas al caso han explicado con precisión las circunstancias del accidente. Los padres del bebé, una niña de catorce meses, estaban alojados en un hotel de Cala Rajada. El establecimiento ocupa toda una manzana, y en su interior alberga un gran espacio, en el que hay un pequeño teatro donde se desarrollan las actividades de animación, y el escenario está cubierto por tres planchas de aluminio. Una de estas tres planchas fue la que se desprendió y golpeó al bebé en la cabeza.

Sobre las doce del mediodía del viernes, los padres salieron con el bebé del edificio del hotel y se vieron sorprendidos por el fuerte aguacero, por lo que se refugiaron en el escenario. Fue entonces cuando la plancha central de aluminio instalada en el tejadillo del teatro se desprendió, golpeando al bebé en la cabeza y provocándole gravísimas lesiones.

La pequeña fue asistida en primera instancia en el lugar por un equipo de 061 y un pediatra de Cala Rajada. Ante la gravedad de sus heridas se movilizó una UVI móvil pediátrica, que la trasladó a Son Espases, donde quedó ingresada en la UCI. La pequeña falleció al día siguiente.