La Policía Nacional ha incoado en los últimos meses tres propuestas de sanción a los responsables de diferentes drones que volaban sin permiso en el espacio aéreo de Palma. En uno de los casos estuvieron vigilando una nave industrial precintada judicialmente para intentar entrar a recuperar unas armas que había en su interior. Otro fue un hombre que sobrevoló un colegio para observar a su hija en el patio. Y el tercero voló un dron sobre el centro de Palma y lo estrelló contra un coche aparcado.

La Policía cuenta desde el pasado mes de octubre con un grupo de control aeronáutico que inspecciona las diferentes actividades que se llevan a cabo en el espacio aéreo de la ciudad. 

Estos agentes supervisan los vuelos programados e investigan las conductas que suponen un riesgo para la seguridad ciudana y el espacio aéreo.