Un hombre de 61 años admitió ayer en un juzgado de Palma haber sometido a abusos sexuales y a acoso a una joven de 27 a la que le había alquilado una habitación en su casa, y se conformó con una pena de dos años de prisión y el pago de dos multas.

En el juicio celebrado ayer en un juzgado de lo penal de Palma, el individuo admitió los hechos de los que le acusaba el fiscal. Durante el verano de 2018 le había alquilado una habitación de su casa a una joven. Desde el principio le hizo proposiciones sexuales y la sometió a tocamientos en varias ocasiones, pese a las reiteradas quejas de la víctima.

Ante el rechazo de la joven, envió varios correos a los grandes almacenes donde ella trabajaba haciéndose pasar por un cliente y quejándose de ella, y le envió a ella repetidos mensajes de WhatsApp amenazándola.

El hombre ya ha pagado una indemnización a la víctima. Ayer aceptó una pena de dos años de cárcel por los abusos sexuales, y multas por el acoso y las lesiones psicológicas que le provocó. Además tendrá prohibido acercarse a ella durante tres años.