Una discusión en un bar de Can Pastilla derivó ayer en una violenta agresión con arma blanca de una mujer a su pareja. La víctima sufrió una herida en el cuello después de que la atacante le realizar un corte, supuestamente, con un cuchillo que portaba en el bolso. Agentes de la Policía Nacional detuvieron a la agresora, de 29 años, por un presunto delito de malos tratos en el ámbito familiar.

Los hechos tuvieron lugar sobre la una y media de la madrugada de ayer en un establecimiento del barrio palmesano de Can Pastilla. La Sala del 091 de la Policía Nacional fue alertada de que una mujer estaba agrediendo violentamente a un hombre en el bar. Como consecuencia, la víctima sufrió un corte en el cuello del que empezó a manar abundante sangre.

Una patrulla policial se desplazó rápidamente hasta el lugar señalado. Nada más llegar, los agentes se encontraron a un hombre tendido en el suelo en estado semiinconsciente. Se había tratado de taponar una herida en el cuello con servilletas. Estas estaban manchadas de sangre y había dejado un charco.

En primer lugar, los policías avisaron a las asistencias sanitarias para que se personaran rápidamente en el lugar. Mientras tanto, los funcionarios se entrevistaron con los policías para tratar de reconstruir qué era lo que había ocurrido.

De acuerdo con los testimonios recabados por los agentes, la mujer había estado maltratando al hombre durante toda la velada. Tras una discusión verbal, la agresora se comportó de manera violenta, pese a que su hija menor de edad se encontraba delante.

Durante toda la cena, la mujer había estado maltratando a su pareja. Su actitud pendenciera no había pasado desapercibida a los clientes del establecimiento. Hasta el punto de algunos de los clientes le recriminaron su actitud e instaron a la agresora a recobrara la compostura y mantuviera la calma.

Lejos de hacer caso, su comportamiento violento fue en aumento. De hecho, la agresora cogió las llaves, se las metió en el puño y golpeó a la víctima clavándoselas en la cara. Todo ello en presencia de la menor.

El hombre no respondió al ataque y decidió salir a la calle. Nada más traspasar el umbral de la puerta, sufrió un corte. La víctima regresó de inmediato al establecimiento y comenzó a pedir auxilio mientras sangraba abundantemente por el cuello. Al parecer, su pareja le había hecho un profundo corte por la espalda mientras estaba desprevenido.

Con el arma blanca en el bolso

La presunta agresora había desaparecido rápidamente del lugar. Unos instantes más tarde, la mujer llegó hasta el lugar en el interior de un taxi. Tras examinarle el bolso, los agentes le intervinieron un cuchillo de sierra, de hoja puntiaguda, que había utilizado supuestamente para perpetrar el ataque.Entre sus efectos personales, los policías también le encontraron os teléfonos móviles. Uno de ellos pertenecía al hombre, que decía haberlo perdido. Con todos estos datos los policías detuvieron a la mujer por un presunto delito de malos tratos en el ámbito familiar.