Dos jóvenes estaban sentados en una roca en Cala Vinyes, cuando este panorama idílico se tornó abruptamente en tragedia. La piedra se deslizó y aplastó a la chica e hirió al joven que le acompañaba. Como buenamente pudo, el chico pidió auxilio con su teléfono móvil a los servicios de emergencia, pero ella ya había fallecido.
Este fatal accidente ocurrió poco antes de la medianoche del lunes a la altura del número 31 de la calle Vista de la Mar de Cala Vinyes. Los dos jóvenes anduvieron por un estrecho camino hasta llegar cerca del mar y se sentaron en una roca de grandes dimensiones junto al acantilado.
De repente, la pesada roca de casi media tonelada se deslizó con la inmensa desdicha de que cayó sobre la joven y le causó la muerte en el acto. Como buenamente pudo, el joven sacó su teléfono móvil y avisó a los servicios de emergencias para que les rescataran.
Numerosos efectivos de Bombers de Mallorca, procedentes de tres parques, se movilizaron de inmediato para socorrer a los dos jóvenes. Los efectivos del parque de Calvià se desplazaron al completo, también acudieron efectivos de Llucmajor y el Grupo de Montaña de Inca.
Ante le imposibilidad de levantar la inmensa roca, los bomberos tuvieron que colocar cojines hidráulicos para elevarla y poder extraer el cuerpo de la joven, atrapada bajo la mole, y el chico con las piernas aprisionadas. La labor se prolongó durante unas dos horas.
Una vez que los cojines hidráulicos elevaron suficientemente la roca como para poder extraer los cuerpos de los jóvenes, las asistencias sanitarias se hicieron cargo de ellos. Los facultativos solo pudieron certificar la defunción de la chica.
El chico fue trasladado en una UVI móvil hasta Son Espases, Los facultativos comprobaron que el impacto de la roca le había producido la fractura de varias vértebras, pero no le había producido lesión medular.
Visita del alcalde
La Guardia Civil abrió una investigación para esclarecer cómo se habían producido los trágicos hechos. Los dos jóvenes eran compañeros de trabajo en un bar de Palmanova. La víctima mortal, Sandra Amorós Ortuño, había venido de la localidad murciana de Yecla. Mientras Adelardo C.T. procede de Badajoz.
El alcalde de Calvià, Alfonso Rodríguez acudió ayer al lugar donde había ocurrido el trágico accidente para comprobar in situ cómo se habían producido los hechos y si había en ese tramo de costa un elemento de riesgo.
