Una decena de vecinos fueron desalojados ayer, como medida de precaución, tras un incendio en un segundo piso de la calle Miquel Marquès de Palma. Los bomberos rescataron a un gato y un perro atrapados en dos viviendas.

El incendio ocurrió ayer sobre las nueve y media de la mañana en un segundo piso del número cinco de la calle Miquel Marquès de Palma. Este domicilio se encontraba vacío, pero dos mascotas, un gato y un perro, habían quedado en el interior.

Varias dotaciones de Bombers de Palma -con dos autoescaleras, una autobomba y dos vehículos auxiliares- se desplazaron hasta el lugar del siniestro. Por su parte, agentes de la Policía Local cerraron al tráfico la calle Miquel Marquès mientras se prolongaban las tareas de extinción.

El humo del incendio, localizado en el segundo piso, ascendió por el hueco de la escalera, que hizo un efecto chimenea, hasta los pisos superiores del edificio. Los bomberos consiguieron rescatar al atemorizado perro de un segundo piso. No había rastro del gato.

Un asustado felino se refugió del incendio en el alféizar de una ventana del tercer piso. Los bomberos utilizaron la autoescalera para descender al atemorizado animal hasta el suelo. Mientras tanto, los vecinos desalojados y muchos curiosos se arremolinaron en la calle para observar la espectacular intervención.

Tras sofocar el fuego, los esfuerzos de los bomberos se centraron en ventilar el edificio. Una vez que ya no había peligro, los residentes han podido regresar a sus viviendas.

El cierre al tráfico de la calle Miquel Marquès alteró la salida de autobuses de la Estación Intermodalque suelen utilizar esta vía. La Policía Local de Palma se encargó de desviarlos mientras se prolongaban las tareas de extinción.