Un juzgado de Palma ha condenado hoy a un hombre a dos años de prisión por desvalijar dos casas de la ciudad e intentar robar un coche con la conductora dentro, tras verse descubierto, para huir en noviembre de 2018.

El acusado, que está en prisión y que fue juzgado recientemente por otro caso por el robo de 300.000 euros a unos trabajadores del grupo Pabisaen el verano de 2015, ha reconocido los hechos ante el juez.

Inicialmente, se enfrentaba a una petición de condena de siete años de cárcel por parte de la fiscalía, pero hoy el ministerio público ha rebajado su solicitud a dos años al apreciar la circunstancia atenuante de reparación parcial del daño como muy cualificada, ya que ya ha pagado 15.000 euros.

Tras admitir los cargos, el magistrado ha dictado sentencia ´in voce´ y le ha impuesto una pena de dos años de prisión por un delito continuado contra el patrimonio que engloba dos delitos de robo con fuerza en casa habitada y otro de robo de uso de vehículo en grado de tentativa.

En concepto de responsabilidad civil, el ladrón tendrá que indemnizar a dos víctimas con más de 20.300 y 8.500 euros, respectivamente.

El juez le ha suspendido la pena de prisión durante tres años con la condición de que no delinca y de que pague la compensación económica en los próximos meses.

El sospechoso, de 48 años y natural de Cuba, forzó la puerta de un domicilio haciendo palanca la tarde del 24 de noviembre de 2018 en la zona del Pueblo Español, en Palma. Una vez dentro de la casa, se apoderó de cuatro bolsos de la marca Luis Vuitton valorados en 1.620 euros, 945 euros, 1.200 y 895 euros, joyas, cuatro pares de gafas de primeras marcas, un reloj de 1.400 euros y más de 5.000 euros en metálico.

Horas después, sobre la una de la madrugada del 25 de noviembre, junto con un compinche, colocó una escalera, rompió una persiana y una ventana para entrar en otra vivienda en la calle Anselm Turmeda, en Palma. Allí, revolvió y vació armarios y cajones, desmontó muebles, levantó el falso techo y las trampillas de los aires acondicionados y sacó el cuadro de luces para robar valiosas joyas, relojes y una bolsa de viaje.

Cuando el ladrón se alejaba de la casa, fue sorprendido por un ciudadano. Por ello, echó a correr, abandonó la bolsa de viaje con varios efectos y paró un vehículo conducido por una mujer, a la que empujó para intentar introducirse en el coche y huir con la conductora dentro. No lo consiguió porque varios testigos se lo impidieron.