Un asaltante de una panadería del barrio palmesano del Rafal Vell no contó con la feroz oposición de la propietaria, de 80 años, y de su hijo. El atracador le pidió la mujer todo el dinero de la recaudación mientras esgrimía un destornillador. La mujer se negó en rotundo a acceder a sus pretensiones. El delincuente emprendió la huida y una patrulla de la Policía Nacional le detuvo poco después por un presunto delito de robo con violencia e intimidación.

Los hechos tuvieron lugar sobre las cuatro y cuarto de la tarde del miércoles en un establecimiento del barrio del Rafal Vell de Palma El malhechor irrumpió en una panadería esgrimiendo un destornillador. La circunstancia de que la dependienta y propietaria tuviera 80 años le hicieron creer que podría obtener fácilmente el botín. Craso error. La anciana opuso una fuerte resistencia y, además, contó con la inestimable ayuda de su hijo. Entre ambos consiguieron repeler al atracador.

El asaltante emprendió la huida con las manos vacías. Mientras, los afectados llamaron a la sala del 091 para denunciar el atraco. Numerosos coches patrullas de la Policía Nacional se movilizaron rápidamente por la zona para tratar de atrapar al delincuente.

El dispositivo no tardó en dar sus frutos. A los pocos minutos, los agentes que iban en un coche patrulla repararon en que un individuo, de unos 40 años, encajaba perfectamente con la descripción física del sospechoso que les habían facilitado a través de la emisora. Tras comprobar que, efectivamente, se trataba del atracador, fue detenido por un presunto delito de robo con violencia e intimidación. El detenido se espera que sea puesto a disposición judicial en las próximas horas.