La fiscalía solicita dos años de prisión para un hombre acusado de someter a malos tratos físicos y psicológicos a su pareja durante 15 años en Palma. La víctima aseguró durante el juicio que su relación "fue un infierno" y dijo haber recibido varias "palizas" que no denunció por miedo. Varios testigos confirmaron haber presenciado agresiones del acusado a la mujer a lo largo de aquellos años. El procesado, por su parte, negó todas las acusaciones. "Nos llevábamos súper bien. Se lo ha inventado todo por celos", afirmó.

Los episodios de malos tratos se habrían sucedido entre los años 2000 y 2015, según el relato del ministerio público en su escrito de acusación. La fiscalía sostiene que el hombre, que tiene ahora 55 años, impuso sobre su pareja "una situación de dominación sustentada en el abusivo ejercicio de su autoridad, basada en su superioridad física y en el miedo que generaban sus frecuentes actos de violencia".

La mujer contó durante la vista oral, celebrada en un juzgado de lo penal de Palma, que el acusado la controlaba en todo momento. "No hacia nada sin que él lo supiera. Hubo palizas, malas palabras... Ha sido un infierno", dijo. La denunciante relató dos episodios de malos tratos. Uno, ocurrido el bar donde ella trabajaba, cuando el procesado la agarró del cuello y la lanzó contra una máquina por hablar con otro hombre. Otro, en una playa donde también la cogió del cuello y le quitó el perro con el que estaba paseando para arrojarlo después al mar.

La hija de la mujer aseguró haber presenciado varias agresiones. "Una vez le vi darle un puñetazo. A mi madre le he visto marcas de golpes y palizas. La controlaba mucho", afirmó. Una sobrina aseguró que el procesado protagonizó "muchos altercados en el bar" donde trabajaba su tía. "Iba a pedirle dinero y si no se lo daba, rompía vasos y montaba follones", explicó.

El hombre negó todas estas acusaciones. Según su versión, la relación con su pareja era buena. "Jamás le he pegado ni la he controlado. Todo esto es por un ataque de celos. Después de que rompiéramos, vio que en mi perfil de Whatsapp tenía una foto con la chica con la que estoy ahora y me denunció", aseveró.

El fiscal, al concluir la vista oral, mantuvo su petición de dos años de prisión para el hombre como autor de un delito contra la integridad moral. La defensa, por su parte, reclamó la absolución del sospechoso al considerar que no había pruebas de los hechos denunciados. El caso quedó vista para sentencia.