Un irlandés de 45 años murió ayer asesinado de cuatro disparos por la espalda en la Costa de la Calma en Calvià. El suceso se produjo sobre las nueve de la noche entre las calles sa Madona y Huguet des Far.

Al parecer se trata de un posible ajuste de cuentas y las primeras investigaciones apuntan a que el asesino o asesinos se confundieron de víctima por el gran parecido físico con el objetivo que buscaban. El hombre asesinado iba acompañado de su mujer y unos amigos en el momento del tiroteo y fue confundido con otra persona que buscaban los autores.

Los servicios de emergencia del 061 recibieron el aviso de un herido grave por arma de fuego con un orificio de entrada en la zona de la espalda.

Al llegar los facultativos y el vehículo de asistencia avanzada del SAMU el hombre presentaba parada cardiorespiratoria. Le practicaron las medidas de reanimación necesarias pero no fueron suficientes y fue trasladado de urgencia al centro hospitalario de Son Espases donde falleció poco después.

La Policía Judicial de la Guardia Civil se hizo cargo de la investigación y todo apunta a un ajuste de cuentas. En el punto en que asesinaron al hombre no se encontraron casquillos de bala. Al cierre de esta edición los agentes interrogaban a cinco testigos que se encontraban en el lugar de los hechos en el momento en que se produjo el tiroteo.

El presunto asesino en un bar

Al parecer uno de esos testigos relató a los investigadores que escucharon decir al presunto asesino en un bar que iba a matar a un hombre. Los agentes de la Policía Judicial permanecieron toda la noche recabando pruebas en el lugar del suceso y acordonaron la zona para poder recoger las pruebas necesarias que serán analizadas por el departamento de balística en las próximas horas.