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Tribunales

Piden 28 años de prisión a seis acusados de robar 400.000 euros en una joyería

La banda aprovechó la Semana Santa de 2014 para abrir un butrón en una tienda del Coll d'en Rabassa y desvalijarla - Se llevaron dos cajas fuertes de una inmobiliaria y actuaron en otros dos locales - Vivían en la península y venían a Mallorca para cometer los robos

Piden 28 años de prisión a seis acusados de robar 400.000 euros en una joyería

La fiscalía reclama penas que suman 28 años de prisión para una banda que desvalijó varios comercios de Mallorca. El golpe más sonado fue el robo de joyas valoradas en unos 400.000 euros en un establecimiento del Coll d'en Rabassa al que accedieron tras abrir un butrón en el edificio. También se llevaron dos cajas fuertes de una inmobiliaria. Los procesados residían en la península y se desplazaban a la isla para cometer los robos. Según la Policía, formaron en su día la banda de butroneros más activa de la isla. Están acusados de pertenencia a grupo criminal y robo con fuerza continuado.

De acuerdo con el escrito de conclusiones del ministerio público, los seis imputados -cinco hombres y una mujer de entre 29 y 52 años- formaban un grupo estable para cometer robos tanto en la península como en Mallorca, adonde se desplazaban para regresar después por vía marítima con los efectos sustraídos. Tenían numerosas herramientas, como cizallas, extractores de bombines y sierras radiales.

La banda aprovechó la Semana Santa de 2014 para cometer un gran robo en Palma. Sabían que en un edificio de la calle Cardenal Rossell estaba en obras y forzaron la puerta de la finca para llegar a un pasillo que comunicaba con la trastienda de una joyería. Allí abrieron un butrón en la pared para acceder al local, desconectaron las cámaras de seguridad y abrieron la caja fuerte con una radial. Lograron apoderarse de 3.000 euros en efectivo y un gran número de relojes y mantas de joyas de oro y plata. Los investigadores de la Policía estimaron el valor del botín en unos 400.000 euros.

Dos de las cajas fuertes que fueron asaltadas por los ladrones. ALEJANDRO FERNÁNDEZ

Durante esas jornadas festivas, el grupo actuó también en una agencia de viajes de la calle Golfo de Cádiz, en Palma. Los ladrones inutilizaron la alarma, extrajeron el bombín de la puerta y, una vez dentro, se apoderaron de 2.140 euros, 943 dólares y una bicicleta de alta gama.

El 7 de agosto de ese año la banda regresó a Palma para asaltar una inmobiliaria de la calle Reverendo Antonio Tauler. Cuatro de los acusados, según el fiscal, llegaron de madrugada al lugar a bordo de dos coches y fracturaron la puerta de entrada y la persiana para entrar. Arrancaron dos cajas fuertes y se las llevaron a un piso que habían alquilado en la ciudad para abrirlas y adueñarse de los 7.055 euros que contenían.

Días antes, el 30 de julio, dos miembros del grupo se colaron en una agencia de viajes de la calle Foners tras manipular la cámara de seguridad del edificio y forzar la puerta. Una vez dentro, forzaron la caja fuerte y se llevaron 7.812 euros en efectivo y un ordenador portátil.

Dos robos frustrados

La organización, de acuerdo con el escrito de acusación, intentó en vano cometer otros dos robos. Uno de ellos, en un establecimiento de comida rápida de Porto Cristo, al que acudieron el 14 de febrero de 2013 para estudiar la ubicación de las cámaras de seguridad y rociar con un aerosol el sensor de movimiento para inutilizarlo. Un empleado descubrió esta treta y alertó a la Policía, lo que frustró el robo.

También trataron de desvalijar un salón de juego situado en el paseo marítimo del Port d'Alcúdia. El 19 de julio de 2014, tres miembros de la banda entraron en el local y aprovechando un descuido de los trabajadores emplearon el mismo método para evitar que el sensor de movimiento funcionara. Los delincuentes desistieron porque no estaban convencidos de poder cometer el robo sin ser descubiertos, según la acusación.

El fiscal considera que estos hechos constituyen un delito de pertenencia a grupo criminal, dos de robo con fuerza en grado de conspiración y cuatro de robo consumado. Por ello reclama penas que suman 27 años y once meses de prisión para los seis acusados. Las peticiones de condenas van desde un año y once meses hasta los seis años, en función del número de robos en los que participó cada uno de los sospechosos. Además, el fiscal solicita que indemnicen a los perjudicados por el dinero y las joyas que sustrajeron y los daños que provocaron en los locales. El juicio se celebrará próximamente.

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