Cinco detenidos por presuntamente desvalijar tres gestorías de Palma en un tiempo récord ingresaron ayer tarde en prisión por orden judicial. Los acusados habrían viajado expresamente desde Madrid para cometer los robos durante el pasado fin de semana. La Policía Nacional culminó la investigación en cuestión de horas al desarticular la banda e intervenir herramientas, como inhibidores de frecuencia y destornilladores, que habrían utilizado en los golpes. Además, los agentes encontraron un bombín que corresponde a una de las oficinas allanadas.

Los acusados son cuatro jóvenes y el tío de uno de ellos, de unos 50 años, quien alquiló un coche y se lo prestó a su sobrino para cometer las fechorías. Los cinco negaron ayer ante el juez su implicación en los hechos. Sin embargo, el magistrado de guardia ordenó prisión provisional para todos ellos. Fuentes conocedoras del caso apuntaron que en uno de los locales los ladrones lograron hacerse con un botín que ronda los 19.000 euros. Ayer, especialistas del grupo de Subsuelo de la Policía realizaron una inspección relacionada con esta investigación. Los detenidos, que pretendían regresar a Madrid tras los robos, estaban especializados.