La mujer de 61 años que anteanoche fue atropellada a la entrada de Calvià falleció de madrugada en el hospital Son Espases debido a las gravísimas lesiones sufridas. El conductor que la arrolló, un británico de 43 años residente en la zona, se dio a la fuga pero fue interceptado poco después por la Policía Local. El hombre triplicó la tasa máxima permitida de alcoholemia y fue detenido.

El sospechoso, que está acusado de delitos de homicidio imprudente, contra la seguridad vial y omisión del deber de socorro, ingresó ayer en prisión por orden jucial. Ayer por la tarde fue puesto a disposición del juzgado de guardia. Es la segunda muerte que provoca un conductor ebrio en solo cuatro días en Mallorca, después de que el pasado viernes una mujer de 48 años falleciera en circunstancias similares en Palma.

Según explicaron fuentes policiales y sanitarias, los hechos ocurrieron hacia las ocho y media de la tarde del lunes en la unión de la avenida Palma y la carretera MA-1015, a las afueras de Calvià en dirección a Palmanova. Un coche que entraba en el pueblo a gran velocidad arrolló a una mujer de 61 años que se encontraba en el margen derecho de la calzada, la arrastró a lo largo de unos 50 metros sobre el capó hasta que salió despedida. El turismo impactó después contra cuatro vehículos que estaban aparcados, dos postes de hierro y un farola.

Pese a la gravedad de lo ocurrido, el hombre que iba al volante decidió emprender de nuevo la marcha y se dio a la fuga. Varias llamadas alertaron de lo ocurrido a los servicios de emergencias, tras lo que ambulancias y patrullas de la Policía Local de Calvià y la Guardia Civil de Tráfico acudieron de inmediato al lugar. Los efectivos sanitarios comprobaron que la peatona había sufrido heridas muy graves y tras atenderla en el lugar del siniestro la trasladaron de urgencia al hospital Son Espases, donde ingresó en estado crítico.

A cuatro kilómetros

Los agentes, mientras tanto, se entrevistaron con varios testigos y obtuvieron una descripción del vehículo que había arrollado a la mujer. Las patrullas empezaron a dar batidas por la zona en busca del coche y poco después lo encontraron circulando por el polígono de Son Bugadelles, a unos cuatro kilómetros del lugar del accidente. La dotación de la Policía Local de Calvià que dio con é l lo interceptó. El hombre que iba al volante, un británico de 43 años, vecino de Calvià e identificado como R.C.W., fue sometido a una prueba de alcoholemia. El resultado fue de 0,71 miligramos por litro de aire espirado, casi el triple del máximo permitido. El acusado quedó detenido y fue trasladado a dependencias policiales para ser interrogado.

La mujer a la que atropelló no pudo recuperarse de las lesiones sufridas y poco antes de la una y media de la madrugada de ayer falleció en el hospital Son Espases. El óbito fue comunicado al juzgado de instrucción número 4 de Palma, que se encontraba en funciones de guardia, y el cadáver fue trasladada al Instituto de Medicina Legal para practicarle la autopsia. La víctima, de 61 años, era la propietaria del conocido restaurante Ca Na Cucó, situado a pocos metros del lugar donde fue arrollada. La mujer era muy conocida y apreciada en Calvià, donde su fallecimiento provocó una gran consternación.

El conductor detenido pasó la noche en los calabozos de la Policía Local, que asumió la investigación del siniestro. Los investigadores han elaborado un atestado sobre las circunstancias en las que se produjo el atropello y sospechan que, además de circular bajo la influencia del alcohol, lo hacía a una velocidad superior a la permitida. El hombre fue interrogado por los agentes a lo largo de la mañana y por la tarde fue puesto a disposición del juzgado de instrucción número 4 de Palma, en funciones de guardia, que lo envió a prisión.

Por otra parte, el hombre de 73 años que el pasado lunes fue atropellado por un autobús de la EMT en la calle Joan Miró, en Palma, continuaba ingresado en estado crítico en la UCI de Son Espases. Su estado continuaba siendo muy grave pero su situación era estable.