La Audiencia Provincial ha condenado a nueve meses de prisión al encargado de una obra en la que un trabajador murió aplastado por una excavadora en s´Arenal. El fallo de la sección segunda rebaja la pena de 20 meses de cárcel impuesta al acusado por un juzgado de lo penal de Palma al aplicar la atenuante de dilaciones indebidas a los dos delitos de imprudencia grave y contra los derechos de los trabajadores por separado.

Los hechos ocurrieron el 15 de junio de 2000 en las obras de la urbanización La Ribera, en s´Arenal, cuyos responsables fueron sancionados dos veces en los meses anteriores por la ausencia de señalización para la circulación de vehículos. Aquel día, un trabajador estaba en un pozo de alcantarillado para cortar un tubo y al salir de nuevo a la superficie fue aplastado por una excavadora que transportaba material y cuyo conductor llevaba puestos unos auriculares, por lo que no escuchó los gritos de alerta de otro obrero. La víctima, de 39 años, murió en el acto.

El juzgado de lo penal consideró probado que el encargado de la obra había indicado a la víctima y al resto de trabajadores que no hacía falta que colocaran conos y vallas alrededor del pozo en el que estaban. El juez le consideró autor de un delito contra la seguridad de los trabajadores y de otro de homicidio imprudente, apreciando la atenuante muy cualificada de dilaciones indebidas, y le impuso 20 meses de prisión. Además, le condenó a indemnizar con 240.000 euros a los familiares de la víctima.

Tanto su defensa como la fiscalía recurrieron la sentencia al entender que la atenuante debía aplicarse a los dos delitos por separado y no al total de la pena. El tribunal de la sección segunda de la Audiencia Provincial ha estimado ahora el recurso, ya que resulta más beneficioso para el acusado. Así, los magistrados han revocado el fallo y han impuesto al condenado una pena de nueve meses de prisión.