La Vía de Cintura se convirtió ayer por la mañana en un callejón sin salida. Dos aparatosos accidentes de tráfico ocurridos en hora punta, en apenas media hora y casi en el mismo sitio, colapsaron la ronda de circunvalación de Palma desde Bendinat hasta más allá de la autopista de Inca. Miles de conductores quedaron atrapados al quedar cortada la carretera en dirección hacia Andratx para que actuaran los servicios de emergencias. La circulación, también congestionada en el otro sentido, tardó casi dos horas en quedar normalizada.
El primer siniestro ocurrió a las siete y media de la mañana en el kilómetro 6,9 de la Vía de Cintura, cerca del túnel de Gènova. Una conductora que circulaba en dirección a Palma perdió el control de su Peugeot 306 y acabó cruzando la mediana y adentrándose en la calzada destinada al sentido contrario, donde estuvo a punto de llevarse por delante a un motorista. El turismo no colisionó contra ningún vehículo y fue a parar al arcén tras cruzar los dos carriles. Varias ambulancias y patrullas de la Guardia Civil de Tráfico acudieron de inmediato al lugar del accidente. Los efectivos sanitarios comprobaron que la conductora solo presentaba lesiones leves, pero la trasladaron a un centro sanitario. Apenas veinte minutos después y a solo 500 metros, el conductor de un Seat Ibiza perdió también el control del coche y acabó en la mediana tras dar varios giros sobre sí mismo, aunque resultó ileso.
El caos fue inmediato. La Guardia Civil de Tráfico cortó durante unos minutos la circulación en dirección a Andratx para que los operarios del Consell limpiasen la calzada y luego restringió la circulación hasta que una grúa retiró los turismos siniestrados. Esta situación generó un gigantesco atasco en toda la Vía de Cintura, especialmente en sentido a Andratx, en plena hora punta de entrada a colegios y puestos de trabajo. Unos diez mil conductores, según los cálculos de la Dirección General de Tráfico (DGT), quedaron atrapados en unos diez kilómetros de retenciones, que llegaron más allá de la incorporación desde la autopista de Inca, también colapsada.
La Guardia Civil de Tráfico reguló la circulación en diversos puntos para intentar disolver el atasco. La congestión se prolongó hasta casi las diez de la mañana, según informaron fuentes del departamento de Carreteras del Consell de Mallorca y del instituto armado.
