El Tribunal Supremo ha confirmado la pena de 10 años y 3 meses de cárcel y el pago de indemnizaciones que superan los 9.000 euros que le fue impuesta el pasado mes de marzo por la Audiencia Provincial del Palma de Mallorca a Miguel Ángel Capó Pons, conocido como el violador de Es Castell, por tres delitos de agresión sexual, uno de ellos con introducción, y tres tentativas, todas ellas entre los meses de abril y julio de 2010. El violador, de tan sólo 20 años de edad, abordaba a sus víctimas cuando transitaban solas por la calle, tirándolas violentamente al suelo y golpeándolas. En algunas ocasiones no pudo consumar sus intenciones porque las chicas lograron escapar.