La actuación de la Policía Local de Marratxí evitó que el fuego que se declaró en un coche aparcado en la calle Son Alegre se extendiera a otros vehículos. El fuego se originó en la madrugada del martes, en la parte delantera de un Peugeot 106 que estaba estacionado. Los policías que acudieron al lugar intentaron apagar las llamas con sus extintores, pero no lo lograron, por lo que optaron por romper una ventana del coche para desbloquear el freno de mano y separarlo de los otros coches. Una dotación de los Bombers de Palma sofocó poco después totalmente las llamas.