La Guardia Civil detuvo hace unos días en el aeropuerto de Son Sant Joan, en Palma, a una mujer de origen nigeriano que supuestamente transportaba entre sus pertenencias 18 valiosos teléfonos móviles de última generación. La pasajera aún no se había marchado de la isla cuando fue sorprendida durante un control en la terminal de salidas.

El escáner del aeropuerto detectó la casi veintena de aparatos que llevaba, por lo que la ciudadana fue interceptada. Tras varias averiguaciones y al sospechar de la ilícita procedencia de los terminales, los agentes finalmente procedieron a arrestar a la mujer por un presunto delito de receptación.

A los investigadores les llamó mucho la atención que todos los teléfonos fueran de alta gama. Se trataba de diez modelos de iPhone y ocho Blackberry, que quedaron intervenidos por el Instituto Armado. De hecho, los agentes continúan con las pesquisas en la isla para esclarecer si todos estos teléfonos fueron robados.

La Guardia Civil sospecha que no se trata del primer caso de un extranjero que intenta transportar a su país mercancía que ha sido sustraída para luego revenderla en el mercado negro. Los agentes creen que las bandas de descuideros y ladrones que actúan en la isla utilizan a compatriotas para hacer de ´correo´ y llevar el botín al extranjero, normalmente al centro y norte de África, donde es muy fácil distribuir estos productos de forma clandestina entre la población. Precisamente, la venta de artículos de alta gama como por ejemplo los teléfonos de última generación les reporta grandes beneficios.

El caso de la pasajera nigeriana fue descubierto hace unos días en el aeropuerto de Palma. La Guardia Civil la sorprendió al pasar por el control y detectar que entre sus efectos llevaba 18 valiosos teléfonos.

La sospechosa se disponía a salir de Mallorca con destino a un país extranjero. Antes de que tomara su vuelo, fue detenida por receptación al no poder acreditar que los 18 móviles de última generación eran de su propiedad. Las investigaciones prosiguen por parte de los agentes del Grupo de Patrimonio.