Los amigos de la víctima dieron la voz de alarma. Después de 15 días no tenían la menor noticia de una mujer alemana, de 60 años, residente en Cala Millor. Los peores presagios se cumplieron nada más abrir la puerta. Su cadáver fue encontrado en avanzado estado de descomposición.

Ante la total ausencia de noticias suyas, la inquietud fue en aumento entre sus allegados. Después de intentar contactar con la mujer por todos los medios, sobre las diez de la noche del pasado sábado decidieron poner los hechos en conocimiento de la Policía Local de Son Servera para pedir auxilio.

Junto con los amigos de la mujer desaparecida, una patrulla de la Policía Local de Son Servera se trasladó hasta su domicilio para intentar abrir la puerta. La propietaria de la vivienda había facilitado una copia de las llaves para evitar que tuvieran que forzarla. A pesar de ello, fue imposible la apertura. Desde el exterior se escuchaba maullar desesperadamente a los gatos de la propietaria en el interior del domicilio.

Finalmente, los agentes lograron acceder al interior a través de uno de los balcones de las viviendas anejas. Desde allí se podía ver la luz y la televisión encendidas. Una vez en el interior, el hedor se convirtió en insoportable. En el salón, hallaron el cuerpo de la mujer en un avanzado estado de descomposición.