Una joven de 24 años de edad murió la noche del jueves en Eivissa tras ser atropellada por una moto. Instantes antes del fatal accidente, la víctima salió despedida del asiento del acompañante del vehículo todoterreno en el que viajaba. Su novio, el conductor, fue detenido por un presunto delito de homicidio imprudente. Conducía bajo los efectos de bebidas alcohólicas, ya que dio 0,39 en la prueba de alcoholemia, y según parece había consumido anfetaminas.

Los hechos ocurrieron la noche del sábado, en torno a las 21.50 horas, en el kilómetro 4,800 de la PM-810, la carretera que conecta Santa Eulària con Eivissa. Al parecer, según señalaron varios testigos, entre la pareja se inició una acalorada discusión en el interior del Jeep Grand Cherokee que conducía.

Los primeros indicios apuntan a que el conductor del vehículo todoterreno F.C.S., de 30 años de edad, pudo lanzar al exterior del coche a la joven. Al trazar un giro hacia la izquierda y adentrarse en una explanada de tierra, la víctima salió despedida.

La joven, Yessica T.G., de 24 años, quedó tendida en el suelo. La mala fortuna hizo que una motocicleta que circulaba inmediatamente detrás del coche no pudiera evitar a la chica. El piloto de una Honda VT 125, de 19 años, impactó violentamente contra la víctima.

La joven quedó tendida inerte en el suelo con numerosos traumatismos repartidos por el cuerpo. Un dispositivo especial de emergencias se activó en torno al lugar donde había ocurrido el accidente. Las asistencias sanitarias del Ib-salut desplazaron una UVI móvil para atender a Yessica. Los facultativos no pudieron hacer nada por salvar a la víctima y, finalmente, se vieron obligados a certificar su defunción en el mismo lugar de los hechos.

Agentes de la Guardia Civil de Tráfico también se movilizaron hasta el lugar donde había ocurrido el accidente con fatales consecuencias. Los efectivos del Instituto Armado abrieron una investigación para tratar de esclarecer las circunstancias que rodearon al fatal accidente.

La actitud del conductor del Jeep Grand Cherokee donde viajaba la víctima les llamó la atención desde un primer momento. Los agentes de la Guardia Civil interrogaron a los testigos y a los conductores de los dos vehículos implicados para tratar de reconstruir lo ocurrido.

La joven Yessica T.G., de 24 años, residía con sus padres en la localidad ibicenca de Can Marçà, situada a las afueras de Eivissa. Los primeros indicios apuntan a que su novio la recogió en el vehículo todoterreno con la intención de trasladarse a Santa Eulària del Riu. Por motivos que aún no han trascendido, entre la pareja pudo iniciarse una encendida discusión.

Homicidio imprudente

Los agentes de la Guardia Civil de Tráfico detuvieron al conductor del vehículo todoterreno por un presunto delito de homicidio imprudente, al considerar que "no había cuidado la correcta posición de los pasajeros del coche".