El titular de Instrucción número 4 de Eivissa, Santiago Pinsach, ratificó ayer el ingreso en prisión provisional sin posibilidad de fianza del exportero del Ushuaïa Beach Hotel Paulo César Baptista por un delito de homicidio doloso por el fallecimiento del joven camarero Abel Ureña, a quien propinó dos puñetazos que le causaron graves lesiones y que finalmente le provocaron la muerte.

Baptista, portugués de 33 años, había sido citado para decidir acerca de su situación procesal, detallaron fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Balears (TSJB), ya que a su llegada a España procedente de Holanda, donde estaba huido, fue un juzgado de Madrid el que acordó su ingreso en la cárcel.

Así, en la mañana de ayer y dos horas más tarde de lo previsto, la fiscal de Eivissa pidió mantener la prisión provisional y el juez instructor del caso adoptó la medida. Baptista optó por no hacer uso de su turno de palabra.

Baptista fue conducido bajo fuertes medidas de seguridad al juzgado. Al entrar en las dependencias judiciales se mostró sontriente e incluso lanzó un beso a los cámaras que le esperaban.

Los hechos de los que se le acusan ocurrieron el 19 de agosto. Según grabaron las cámaras de seguridad, aquella noche Baptista, que usaba un nombre falso porque estaba huido de la justicia portuguesa, discutió con la víctima y le asestó menos un fuerte puñetazo que le provocó una conmoción cerebral. Abel Ureña falleció 15 días. Baptista huyó de Eivissa, pero fue detenido en Holanda el 19 de noviembre y extraditado a España.