Una alerta ante un posible accidente de parapente en el Puig de Maria, situado en el término municipal de Pollença, provocó ayer tarde la movilización de un nutrido grupo de efectivos. La tela del paracaídas era visible, con prismáticos, desde abajo. Aunque no había el menor rastro de la persona supuestamente accidentada.
El aviso se dio sobre las seis menos diez de la tarde. Un testigo vio ondear la tela y apuntó a que alguien se podría haber estrellado durante esta práctica deportiva. Efectivos del Grupo de Rescate e Intervención de Montaña (GREIM) de la Guardia Civil, Policía Local de Pollença, bomberos del Consell de Mallorca y asistencias sanitarias del Ib-salut se desplazaron hasta el lugar para atender a la supuesta víctima.
La labor de rescate se antojó harto complicada debido a que la noche se echó poco después de que los distintos efectivos iniciaran la ascensión. Lo escarpado de la zona complicó el acceso al lugar en vehículos todoterreno y una buena parte se tuvo que efectuar a pie. Al cierre de esta edición, no existía constancia de que hubieran localizado al accidentado.
