La fiscalía solicita una condena de once años de prisión para un joven que fue sorprendido el pasado verano en Palma llevando un paquete que contenía cerca de un kilo de cocaína de gran pureza.

El ministerio público considera al sospechoso, de 29 años de edad, responsable de un delito contra la salud pública. Además de la pena de cárcel, la acusación reclama también una multa de 40.000 euros. El juicio contra el imputado está previsto que se celebre la próxima semana en la Audiencia Provincial de Palma. El tribunal de la sección primera será el encargado de enjuiciar el caso.

Los hechos se remontan al pasado día 14 de julio de 2009, sobre las dos de la madrugada, cuando el ciudadano fue interceptado en Palma con un paquete sospechoso. El bulto, de forma rectangular, contenía una sustancia polvorienta de color blanco que, una vez analizada, resultó ser cocaína con una pureza del 84 por ciento, según la versión de la fiscalía. La droga está valorada en unos 40.000 euros y supuestamente iba a ser destinada a la venta entre terceros.