El magistrado Miquel Arbona ha impuesto una condena que suma 38 años de prisión a Augusto Fernando Vega Robalino, el hombre que en el mes de enero del año pasado mató a su ex mujer y al amante de ella. El acusado fue declarado culpable de dos delitos de asesinato, allanamiento de morada y quebrantamiento de morada. El veredicto de culpabilidad lo dictó un jurado popular.

El acusado tendrá que cumplir condena por la muerte de Olimpia Ketty Tomala y Jorge Juan Báez Ripoll.

El acusado ha sido condenado por unos hechos que ocurrieron en la mañana del día 27 de enero, momento en el que Augusto se encontraba ya legalmente separado de su mujer, Olimpia Ketty Tomala Tomala, que le había denunciado varias veces por malos tratos y existía una orden que le prohibía acercarse a ella.

A pesar de la orden logró entrar en su casa tras engañar a una vecina. Accedió a la terraza del piso, que está situado en la calle Málaga de Palma, rompió un cristal y entró en el salón.

Era por la mañana y el acusado se escondió en una habitación. Al rato llegó Olimpia y más tarde el otro hombre. El acusado seguía escondido en la habitación. Al rato fue testigo de cómo la pareja se desnudaba y mantenía relaciones sexuales en la habitación conyugal.

Augusto, según declara probado la sentencia, se dirigió a la cocina y cogió de allí dos cuchillos. Primero apuñaló a Jorge y después hizo lo propio con Olimpia. El hombre recibió once puñaladas, la mujer seis.

Jorge Juan Báez, aunque falleció el primero, aún tuvo fuerzas para avisar a los servicios sanitarios de que alguien había entrado en el domicilio y lo había apuñalado a él y a su pareja. Ambos murieron como consecuencia de esta agresión.

Tras la agresión el asesino salió huyendo, pero fue detenido en la calle. Desde entonces está en prisión.

Augusto Fernando Vega ha sido declarado culpable de dos delitos de asesinato, quebrantamiento de condena y allanamiento de morada, después de que el jurado popular emitiera la semana pasada el veredicto de culpabilidad.