Joan Rosselló, el bombero mallorquín que ayer viajó a Pakistán para colaborar en la búsqueda de supervivientes, recibió con alegría la noticia de que 40 niños habían sido rescatados. "Este tipo de noticias nos animan mucho a seguir adelante", dijo desde Londres, ciudad donde hizo escala antes de poner rumbo a Islamabad. Allí se encontrará con once miembros más de Bomberos Sin Fronteras, todos ellos españoles. "Nos han confirmado que vamos a trabajar en la zona norte de Cachemira", explicó ayer a este periódico. Rosselló y sus compañeros realizarán tareas de rescate en el lugar durante nueve días.