La "entrañable amiga" que acompañaba al rey de España en su accidentado viaje de caza en Botsuana sigue proporcionando detalles de su relación con el monarca. Esta vez, Corinna zu Sayn-Wittgenstein lo ha hecho en la edición estadounidense de Vanity Fair, donde confirma su proximidad al jefe del Estado. "Sí, somos amigos íntimos. Hay quien no entiende que estas cosas puedan pasar en un determinado momento y que terminan, aunque nuestra amistad no termine", asegura.

Pese a que es conocida la aversión de don Juan Carlos a que se ponga en duda su fortaleza física, incluso después de las distintas operaciones a que se ha sometido en os últimos años, Corinna describe que "ahora es un anciano que tiene que hacer frente a sus problemas de salud, por lo que creo que necesita toda la ayuda posible. Hay quienes esperan que ocurra algo grande de una manera u otra, pero no, no va a pasar nada salvo que él no puede irse de caza y yo no puedo volver a España".

Según la propia revista, la aristócrata se ofreció a dar esta entrevista cuado se enteró de que su reportero estrella, Bob Colacello, viajaba a Madrid para escribir un reportaje sobre el rey. Se ha titulado King and Controversy (Rey y Controversia) y narra la sucesión de escándalos que atenazan a la corona hispana, desde el accidente de don Juan Carlos en un safari para cazar elefantes, a la investigación judicial por corrupción a su yerno Iñaki Urdangarin, mencionando como más que una posibilidad la abdicación en el príncipe Felipe. El reportaje está ilustrado con fotografías del monarca en Mallorca, al timón de un barco en la regata que lleva su nombre.

Lejos de optar por la discreción, Corinna, que afirma no haber pisado España desde diciembre, reaviva la polémica de su relación con el jefe del Estado español afirmando que "se comporta como un amigo. Llama a mis hijos una vez por semana para ver cómo están". Como en anteriores ocasiones, recalca que en su faceta como consultora de empresas "nunca he hecho negocio ni recibido dinero en nombre del rey".

Encontronazo con la reina

Corinna zu Sayn-Wittgenstein reconoce en la entrevista que una vez se encontró con doña Sofía. "Sí, me tropecé con ella una vez, por accidente", dice. Se refiere al 8 de mayo de 2012, cuando ambas se cruzaron en el pasillo de hospital Clínico de Barcelona donde don Juan Carlos había ingresado para ser operado de un nódulo pulmonar. La reina abandonó el centro hospitalario precipitadamente.