La cantante catalana, Sílvia Pérez Cruz, aterriza hoy domingo en el Teatre d´Artà en el Cool Days Festival con su nuevo disco 11 de noviembre, su primer trabajo en solitario donde ejerce de autora, arreglista e instrumentista. ¿El resultado? Un trabajo muy personal que sonará a partir de las 20 horas.

-¿Qué ofrece 11 de noviembre?

-Es un disco compuesto poco a poco. La mitad de las canciones son de antes de 2010 mientras que el resto las compuse entre 2010 y 2011. Son canciones que representan trozos de mi vida a nivel musical, momentos emocionales, músicos que me han afectado... Es como un diario de los últimos cinco o seis años. Tanto la letra como la música y los arreglos son míos.

-¿Por qué una fecha como título?

-Es el día que nació mi padre. El disco pretende ser un homenaje a la figura de mi padre ya que la segunda mitad del trabajo está inspirado por el sentimiento de pérdida tras su muerte. El disco es como un nacimiento, además 11 de noviembre es una fecha muy bonita. El disco nace de una pena pero está elaborado con luz y felicidad, por ello, el resultado es un repertorio optimista. He logrado dar forma a un deseo y, esto, me hace feliz.

-Copla, jazz, flamenco... en el disco conviven diferentes influencias. ¿Cómo logra que suene todo muy natural?

-Intento hacer canciones y no soy consciente de los estilos. Quería un disco que sonara a la Sílvia. He creado un propio discurso a partir de distintos recursos que tenía tanto a nivel de estilo como a nivel de composición. He rascado dentro de mí para ver qué salía.

-También canta en catalán, castellano, gallego y portugués.

-Mi objetivo es que la canción quede lo mejor posible. Y para lograr tal finalidad utilizo todos los recursos y las lenguas que conozco porque dan una propia musicalidad a las canciones. Soy bilingüe, el gallego me viene de la familia paterna y el portugués me encanta. Y es que según la lengua utilizada cambias el alma de las canciones.

-Es un disco muy íntimo. ¿Es su proyecto más personal?

-Es súper íntimo. No se aparece a nada y es muy difícil clasificarlo. Debo confesar que no escucho mucha música y he sacado la Sílvia menos influenciada.

-¿Qué es lo que ha sido más complicado de este disco?

-Todo el proceso de creación más que difícil ha sido intenso, duro y largo porque han sido muchos meses elaborando y produciendo el disco. Por otra parte, tocar la guitarra ha sido muy difícil pero Raül Fernández (Refree) insistió en que quedaría más personal.

-¿Qué le empujó a hacer su primer disco en solitario?

-He hecho música toda la vida, es una necesidad. Ha sido un camino infinito de aprendizaje y sabía que haría un disco en un momento dado pero debía tener algo qué decir y encontrar el momento adecuado. En 2009 obtuve el premio Miquel Martí i Pol de composición y me animó a componer porque hasta entonces me daba vergüenza. El galardón me dio la confianza y ganas de componer canciones. Me lo he pasado muy bien creando este disco y la muerte de mi padre me hizo ser consciente de que las cosas se deben hacer cuando toca.

-Es una artista revelación pero ha hecho pocos conciertos.

-Los conciertos son para disfrutarlos. Por eso, elijo bien los lugares y no quiero llevar un ritmo frenético. Busco un equilibrio. El directo ha ido creciendo y ahora estamos en un punto muy bonito. En el escenario del Teatre de Artà estaremos un quinteto y lo más importante es que los músicos se han hecho suyas las canciones y el espectador lo nota.

-¿Qué se encontrarán los espectadores que hoy acudan al Teatre d´Artà ?

-Aquellos que hayan escuchado el disco, hoy encontrarán un repertorio diferente. Es decir, son las mismas canciones que se interpretarán desde un punto de vista distinto porque un directo debe ser más dinámico. En la grabación del disco colaboraron unas 30 personas pero en los conciertos solo somos cinco. Me acompañan Joan Antoni Pich, Mario Mas, Raül Fernández y Miquel Àngel Cordero. Entre nosotros hay un feeling brutal. Estoy muy contenta con este buen equipo porque todos dan lo mejor de sí.

-Es una de las mejores voces del país. ¿Cómo le sientan los halagos?

-Me hacen muy feliz aunque no me lo creo al pie de la letra. Cuando sabes que la gente se cree tu discurso, te da fuerza. Siempre lo entrego todo a la hora de trabajar y estoy muy agradecida con estos alagos. Estoy muy contenta pero continúo con los pies en la tierra.