"Estoy en huelga", era el grito de guerra de algunos lectores que mostraban su total apoyo a la jornada de paro del pasado 14 de noviembre. Otros, pese a su apoyo al llamamiento de los sindicatos, afirmaban que "la pena es que por muchas huelgas que hagamos, al final la banca es la que mueve los hilos de este bendito país y será muy difícil cambiarlo. Como no se nos aparezca un mesías...".

Algunos lectores no veían muy claros los motivos para unirse a la huelga, ni tampoco para sumarse a la manifestación -a la que acudieron más de 50.000 personas - ya que, en su opinión, "no cambiará nada de lo que Rajoy y toda su tropa pensaban hacer. El pueblo seguirá igual o peor y, en las próximas elecciones, todos volverán a votarlos".

Sobre los sindicatos se creó un debate intenso en el que algunos manifestaron su desconfianza hacia ellos con un explícito: "No puedo con ellos". Sin embargo, otros replicaban diciendo que "la manifestación ha sido convocada por los sindicatos, pero hoy nos manifestamos por ti, por mí, por tus hijos, tus nietos...". Hubo quien, al conocer las cifras de participación en la manifestación de Ciutat advertía de que "el éxito de la manifestación se debe a que el ciudadano está desesperanzado, sin futuro y muchos sin un euro de subsidio para poder comer".

En cuanto a las detenciones que se produjeron por la mañana en Avenidas los lectores se mostraron decepcionados. "Son cuatro ratas", aseguraba una lectora al ver las imágenes, a lo que le contestaron que "las ratas son las que critican a quienes luchan por esos derechos sociales y humanos de los que tú y gente como tú gozáis". Otros, bastante indignados, se preguntaban: "¿Cinco policías heridos? ¿Dónde están los manifestantes violentos? ¿Qué armamento llevaban para herir a estos policías tan bien equipados?".

Muchos lectores, al final de la jornada de huelga, reflexionaron y sacaron en claro que si de verdad la sociedad quería un cambio en las políticas llevadas a cabo por el Gobierno "desde el sofá de casa no se arregla nada".