Cuarenta microcanciones que experimentan con nuevos sonidos, ritmos y maneras de cantar componen "Vostè és aquí", el último disco del quinteto mallorquín Antònia Font, que "ha salido diferente" a los anteriores porque sus integrantes tenían "ganas de experimentar", según ha dicho a Efe el cantante Pau Debon.

El álbum, que sale este martes a la venta, rompe con el formato clásico de las canciones pop, que suelen durar entre los dos y tres minutos, y reúne 40 temas, algunos tremendamente breves.

"Nuestro primer objetivo no era hacer canciones breves, sino pasárnoslo bien experimentando con la música", ha explicado a Efe el vocalista de la banda.

Todos los temas son composiciones de Joan Miquel Oliver, que durante la gira del anterior disco de la banda, "Lamparetes", dedicó los tiempos muertos a componer canciones y enseguida reunió mucho material.

"Joan Miquel está en un buen momento creativo", según Debon, que se ha sumado con gusto a la vena experimental del compositor porque le apetecía enfrentarse al reto de tener que utilizar tonos distintos a los habituales.

No obstante, el resultado "no es un disco experimental", según Debon, sino un álbum que se mantiene fiel al estilo de Antònia Font, pero "menos convencional".

Debon no teme que sus seguidores se alejen de la banda ante esta propuesta arriesgada y desconcertante porque, según ha dicho, su público quiere que experimenten y que sean sinceros, y eso es lo que están haciendo, asegura.

"No hacemos discos pensando en vender más o menos o en abrir este mercado o aquel, sino que los hacemos de forma sincera", según Debon, que está convencido de que la banda siempre ha hecho lo que le ha apetecido en cada momento y esta fórmula les ha funcionado, como demuestran los buenos resultados de "Lamparetes".

"Lamparetes" consiguió el Disco de Oro al superar las 20.000 copias vendidas y "Vostè és aquí" ha salido con fuerza y el primer día de ventas ha llegado a ser número uno en iTunes España.

"Hasta 'Lamparetes' yo tenía que alternar la música con otros trabajos, pero ahora las cosas nos van muy bien", ha asegurado Debon.

Como las cosas iban bien y "no había prisa por sacar otro disco", la banda decidió pasarlo bien experimentando, "sin necesidad de que el resultado llegara a convertirse en un disco o, en caso de hacerlo, que fuera algo ligero, sin promoción".

Pero, "la vena perfeccionista" de los miembros de la banda hizo que las cosas tomaran otros derroteros y -según Debo- finalmente hemos trabajado más de lo que pensábamos y está habiendo promoción".

Antes de presentar el disco en el Mercat de Música Viva de Vic (Barcelona) el pasado 14 de septiembre, el quinteto se encerró durante un mes en el Auditorio Municipal de Porreres para ensayar los temas y probar diferentes puestas en escena.

Finalmente eligieron una escenografía con una quincena de bicicletas colgando del techo y una disposición de los músicos poco convencional, con el cantante al fondo.

"Al principio me sentía raro, porque estoy acostumbrado a interactuar con el público y allá atrás no veo a nadie. Pero me he ido acostumbrando y entiendo que un disco diferente tiene que tener una puesta en escena diferente", según el cantante.

Si el eje central del escenario son las bicicletas, el del disco es el metro, como demuestra la carátula del álbum, con un mapa donde las 40 canciones son las diferentes paradas.

"Es comprensible que si tienes ante ti un disco de 70 minutos con 40 canciones en algún momento te despistes y te pierdas, por eso hemos dibujado un plano, para que los oyentes puedan saber por donde van", ha aclarado el músico.

Entre estas cuarenta canciones, 39 son composiciones en catalán y una es una versión en castellano del tema "Leyenda Negra", del grupo mallorquín Tots Sants.

"Ese tema también se puede considerar una experimentación, porque es la primera vez que grabamos un tema íntegro en castellano y porque no solemos hacer versiones", ha concluido Debon.