El exconseller de Presidencia del Consell de Mallorca, Cosme Bonet, ha negado hoy que el gobierno de PSIB y Bloc ocultara presuntas irregularidades en la reforma del Teatro Principal y ha subrayado que fue precisamente el equipo de Francina Armengol el que impulsó la investigación.

Bonet ha respondido así a los reproches del vicepresidente de Cultura, Patrimonio y Deportes del Consell, Joan Rotger (PP), quien ha acusado a la expresidenta Armengol y al exconseller de Cultura Joan Font de tapar supuestas prácticas corruptas cometidas por los gestores de UM entre 2005 y 2007.

"Fue el equipo anterior el que detectó el tema", ha incidido el dirigente socialista, quien ha relatado que profesionales externos llevaron a cabo una investigación sobre los sobrecostes en la reforma del Teatro Principal en la que detectaron indicios de irregularidades que el Consell puso en conocimiento de la Fiscalía Anticorrupción poco antes de las elecciones del pasado 22 de mayo.

No obstante, ante la inminencia de los comicios y dada la sobrecarga de trabajo del ministerio fiscal, ambas partes acordaron que el Consell no presentaría formalmente su informe ante la institución judicial hasta después de la cita electoral.

"Rotger tiene un informe elaborado por el anterior equipo que puede presentar inmediatamente, solo falta su firma. Me sorprende que quiera lanzar acusaciones" cuando la investigación es fruto del trabajo llevado a cabo en la anterior legislatura, ha incidido Bonet.

El exconseller insular y ahora diputado socialista ha recordado que Armengol "nunca firmó la certificación de final de obra" y solo aceptó la recepción de la obra "con objeciones", puesto que el trabajo realizado por la UTE Dragados-Melchor Mascaró presentaba deficiencias.

En su disputa con las empresas adjudicatarias de las obras el Consell profundizó en la investigación de lo que en principio solo parecían deficiencias materiales, para lo que contrató a técnicos externos que apreciaron indicios de presuntos delitos recogidos en un informe que estuvo concluido en marzo de este año.

La investigación, que se refería a la gestión realizada por UM cuando gobernaba en solitario el Consell de 2005 a 2007 con el apoyo del PP, se desarrolló a partir de 2008, cuando UM aún compartía tareas de gobierno con PSIB y Bloc, ha relatado Bonet, quien ha comparado este asunto con el que dio lugar al "caso Can Domenge".

Como ejemplo de las deficiencias e irregularidades advertidas, ha señalado que la UTE que hizo las obras quería cobrar por la instalación de dos ascensores pese a que solo colocó uno.

Para Bonet, la "denuncia infundada" del actual equipo de gobierno del Consell solo se justifica por la obsesión del PP de "cuestionar la gestión anterior" a toda costa.