Aunque muchas veces tener un peso elevado se asocia solo con criterios estéticos, se trata sin duda de una percepción errónea ya que en realidad hablamos de una enfermedad, que en algunos casos puede ser grave.  

Y es que las personas con obesidad grave viven una media de diez años menos que la población sana ya que la enfermedad representa un factor de riesgo de padecer diabetes tipo 2, enfermedad cardiovascular y algunos tipos de cáncer, posicionándose como la quinta causa de mortalidad en todo el mundo.

En concreto, entre el 30-70% de los adultos de la Unión Europea tiene sobrepeso y entre el 10-30% tiene obesidad. Se prevé que en el año 2030 más de la mitad de la población europea sufrirá esta enfermedad.

Por tanto, ante un problema de salud que va más allá de lo estético, es importante recurrir a profesionales especializados que puedan ayudarnos a tratarlo. La endocrinología estudia el comportamiento del sistema endocrino, los desequilibrios hormonales, metabólicos y nutricionales, así como la obesidad y el sobrepeso o la desnutrición derivada de ciertas patologías. La Dra. Gemma Gallo es especialista en endocrinología en el Hospital Parque Llevant. 

¿Cuáles son las causas de la obesidad?

En primer lugar, hay que hacer un estudio de posibles causas hormonales de obesidad. Una vez descartadas, es necesario identificar otros posibles trastornos que puedan tener que ver con la perpetuación del sobrepeso o la obesidad.

«Aunque sus causas son múltiples y complejas, la obesidad no es simplemente el resultado de comer en exceso, sino que existen algunos factores de riesgo de padecerla como la edad, el sexo, factores socioculturales o psicológicos, entre otros», explica la Dra. Gallo

Para identificar el sobrepeso u obesidad en la población adulta se utiliza comúnmente un indicador conocido como índice de masa corporal (IMC). Se trata de una relación simple, la cual divide el peso de la persona en kilos por el cuadrado de su talla en metros (kg/m^2).

Cuando el IMC es igual o superior a 25, hablamos de sobrepeso en hombres e igual o superior a 24 en mujeres, y de obesidad cuando es igual o superior a 30. Este indicador sólo es útil para la población adulta. 

Por norma general, la obesidad es el resultado de la combinación de una serie de factores como la herencia genética, factores ambientales, socioeconómicos, y especialmente hábitos nutricionales inadecuados y sedentarismo.

¿Qué relación existe entre hormonas y obesidad? 

Aunque en un principio pueda parecer que no existe relación entre ambos conceptos, al ser las hormonas los mensajeros químicos encargados de regular las reservas de energía, un desajuste de algunas de ellas puede derivar en la acumulación excesiva de grasa y un control inadecuado del apetito. Esta es otra de las razones por la que es importante acudir al especialista en endocrinología ante un problema de obesidad.