Braian Cufré quiere ser importante en este Mallorca. El argentino, natural de Mar del Plata, demostró en la victoria ante el Lugo que tiene madera de gran futbolista. Con un guante en su pierna izquierda, el lateral aporta toque, pausa y peligro y puede llegar a ser diferencial en la categoría.

Ya la gestación de su fichaje fue diferente a lo habitual. Llegó a la isla después de un mes de interminables tiras y aflojas entre la dirección deportiva bermellona y la de Vélez Sarfield, su club de origen. Cufré llegó como la gran apuesta de Pablo Ortells para el lateral. La propia entidad rojilla bromeó sobre la tardanza de su llegada en redes sociales, lo que ayudó a aumentar la expectación sobre su rendimiento y por el momento no ha decepcionado, sino todo lo contrario.

A pesar de que se le fichó como lateral izquierdo para competir un puesto con Brian Oliván, por el momento García Plaza le ha empleado como extremo tanto en los últimos minutos del choque ante el Tenerife como de titular ante el Lugo. Situado por delante del lateral catalán, Cufré dejó claro desde que tocó el balón que posee ese toque diferente –Dani Rodríguez dijo que «le había sorprendido muchísimo» la calidad del argentino– que hace que se reconozca a los buenos jugadores. Seguro en el pase, no dejó de ofrecerse en todo momento, ya fuera en corto o al espacio, y dejando detalles de calidad en prácticamente todas sus acciones.

El propio técnico del Mallorca, cuestionado tras el encuentro por su demarcación, advirtió que «no es la idea» que tiene en mente para él. Ocupó esa posición por la ausencia de Lago al estar convocado con Costa de Marfil, aunque no extrañaría volver a verlo más veces en dicha posición debido al buen nivel que también está mostrando Oliván.

Cabe tener en cuenta que el Lugo no fue precisamente la mejor piedra de toque, pero aún así Cufré tiene pinta de que dará muchas alegrías a la afición del Mallorca. Suya fue la primera ocasión del encuentro ante el conjunto gallego y por muy poco no debutó como titular anotando su primer tanto. En un alarde de confianza, abandonó su posición en la banda para ocupar el puesto de delantero centro. Dani Rodríguez conectó un pase interior y el argentino, de espaldas a la portería en la frontal del área, realizó un control orientado y probó fortuna con un disparo con rosca que se marchó rozando la escuadra.

Además, demostró que puede dar mucho juego desde la banda metiendo buenos centros al área, una de las cualidades de las que carece el equipo. Y su buen hacer también provoca uno de los primeros dilemas para García Plaza. Si lo mantiene en el once ante el Mirandés, irremediablemente tendría que caer Murilo, que va a más en cada partido, o Lago Junior, que hasta su marcha lo había jugado todo y cuenta con la confianza del técnico bermellón. Sea como sea, Braian Cufré ha aterrizado de pie en el Mallorca.